Estos días contemplábamos una imagen completamente inusual y que no había previsión de fuera a suceder de manera inmediata: la del Presidente estadounidense Barack Obama visitando Cuba.
Esta ha sido la respuesta de Fidel Castro a la histórica visita del presidente Obama a Cuba
- Algunas de las preguntas que surgían: Obama en Cuba: ¿qué resultados reales podemos esperar de su visita? [Opinión]
Ciertamente, son conocidas por todos las tremendas diferencias y desacuerdos que han venido existiendo durante años entre los dos países y el presidente Obama, visitó La Habana con el propósito de enterrar el hacha de guerra. Así que cuando el presidente posó sus pies en la isla, hecho que no había sucedido por parte de un presidente estadounidense desde hacía 88 años, brotaron opiniones para todos los gustos. Hemos de decir que todos hemos visto grandes muestras de cariño hacia el presidente Obama y muchos cubanos salieron a la calle celebrando lo que podría ser el final de la discordia. Así pues, una mirada hacia el futuro y la paz fue lo que la mayoría de la población cubana interpretó con la visita pero, por supuesto, Fidel Castro no tardaría en pronunciarse.
Y la respuesta de Fidel Castro ha sido contundente y publicada en el diario oficialista Gramma: Cuba no necesita que el imperio le regale nada.
Castro ha cargado contra Obama recordando viejas rencillas, echando mano de disputas pasadas, de la vieja Guerra Fría, con tono de reproche y con la seguridad de que no tiene intención alguna de olvidar el turbio pasado:
"Las poblaciones nativas no existen para nada en la mente de Obama. Tampoco dice que la discriminación racial fue barrida por la Revolución; que el retiro y el salario de todos los cubanos fueron decretados por esta antes de que el señor Barack Obama cumpliera 10 años. La odiosa costumbre burguesa y racista de contratar esbirros para que los ciudadanos negros fuesen expulsados de centros de recreación fue barrida por la Revolución Cubana. Esta pasaría a la historia por la batalla que libró en Angola contra el apartheid, poniendo fin a la presencia de armas nucleares en un continente de más de mil millones de habitantes. No era ese el objetivo de nuestra solidaridad, sino ayudar a los pueblos de Angola, Mozambique, Guinea Bissau y otros del dominio colonial fascista de Portugal."
Recuerda que Cuba es autosuficiente y hace alarde de las ideas revolucionarias y de viejos héroes que lucharon por la independencia cubana y en general de todo lo que tanto los distanciaron del gigante norteamericano:
"Se supone que cada uno de nosotros corría el riesgo de un infarto al escuchar estas palabras del Presidente de Estados Unidos. Tras un bloqueo despiadado que ha durado ya casi 60 años, ¿y los que han muerto en los ataques mercenarios a barcos y puertos cubanos, un avión de línea repleto de pasajeros hecho estallar en pleno vuelo, invasiones mercenarias, múltiples actos de violencia y de fuerza?"
Su hermano Raúl Castro, actual mandatario desde que Fidel le traspasara el poder en 2008, tuvo leves gestos de acercamiento al presidente de EEUU, siendo ligeramente cordial, acompañándolo en la despedida y de un modo cortés, pero al mismo tiempo se ha pretendido en todo momento quitar importancia al acercamiento entre los presidentes.
Y es que, según las duras palabras de los muchos exiliados de Cuba, es imposible que la situación de Cuba y sus relaciones con EEUU puedan cambiar mientras Fidel Castro siga con vida.
Su carta, termina así:
"Advierto además que somos capaces de producir los alimentos y las riquezas materiales que necesitamos con el esfuerzo y la inteligencia de nuestro pueblo. No necesitamos que el imperio nos regale nada. Nuestros esfuerzos serán legales y pacíficos, porque es nuestro compromiso con la paz y la fraternidad de todos los seres humanos que vivimos en este planeta."







