Para muchos, la Polymita Picta es la especie de babosa más bella del mundo. Este molusco terrestre es una especie única, y solo se puede encontrar deslizándose por la corteza de los árboles de la isla de Cuba.
Esta asombrosa especie de babosa está al borde de la extinción debido a la actividad humana
Por:Univision
Su nombre científico se puede desglosar en tres partes que describen perfectamente las características visuales que hacen de este pequeño animalito una verdadera maravilla. “Poly” es una palabra griega que significa mucho, “mita” viene del griego “mito”, el cual significa raya. Por otra parte, “picta” significa pintado o coloreado. Entonces podríamos traducir su nombre como “muchas rayas pintadas”.
Imagen Wikimedia Commons
Cada concha posee un patrón único determinado por diferentes tonos de colores, excepto el azul. Pueden ser de un solo color o de varios. Sin embargo, casi nunca se ven las rayas de colores atravesando la concha transversalmente.
Las polymitas están actualmente en peligro de extinción. En el pasado, se podían encontrar a lo largo y ancho de la isla, mientras que hoy su hábitat se ha reducido a la zona de Baracoa, en el oriente de Cuba.
Los cambios climáticos han afectado a esta especie única. Pero el factor principal que ha puesto a esta especie al borde de la desaparición es la comercialización.
Las polymitas son piezas codiciadas por los coleccionistas alrededor del mundo. Un set de 9 caracoles se puede comprar a través de internet por $125, mientras que el precio de una sola concha oscila entre $15 y $20.
También se han explotado en la producción de accesorios y prendas de vestir como collares y aretes por su belleza y vistosidad. Las conchas son muy pequeñas con un tamaño de apenas 20 milímetros de largo.
Las polymitas tienen una forma muy singular de aparearse. El macho dispara un un órgano conocido como “el dardo del amor” sobre un área sensible de la hembra, donde se inocula el esperma.
El gobierno cubano prohibió la recolección de esta babosa hace muchos años y le dio a la polymita estatus de especie protegida. Sin embargo, muchos cubanos siguen usando su explotación como fuente de ingresos para subsistir. Si esta actividad humana no se detiene, este tesoro del reino animal pronto podría desaparecer.