En la Edad Media, podrías haber muerto de estas 5 horribles maneras

¡En esa época la muerte estaba mucho más cerca!

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La Edad Media fue una de las épocas más emocionantes, turbulentas y transformadoras de la historia.

También estaba llena de peligros: para que tengas una idea, si hubieses vivido en esa época, tu expectativa de vida hubiese sido de 30 o 40 años. Claro, si no morías antes de estas maneras...

#5 Viajando

Las personas que tenían que viajar en la Edad Media corrían el riesgo de morir de frío o de inanición si no encontraban un monasterio o una posada que les brindase refugio y comida a tiempo.

También podían ser asesinadas por extraños en el camino. ¿Otro de los riesgos? Contraer una enfermedad y no contar el cuento...

#4 Por ahogamiento

Este era un accidente común cerca de los cursos de agua o debido al uso de pozos para extraer agua potable ya que en la Edad Media las personas que no sabían nadar solían caer en esos pozos de forma inadvertida.

#3 La peste bubónica

Imagen Thinkstock

La peste bubónica o la peste negra fue la pandemia más devastadora en la historia de la humanidad.

Esta plaga es causada por una bacteria que se encuentra en las pulgas y los roedores salvajes. Dicha bacteria afecta al sistema inmune, se forman "bubones" (inflaciones cutáneas supurantes) y cuando las toxinas contaminan el torrente sanguíneo, la piel adoptaba un color oscuro, casi negro.

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Es extremadamente contagiosa y como en la Edad Media no se contaba con los tratamientos adecuados para controlarla murió entre un 30% y un 60% de la población.

#2  Por cometer una herejía

En la Edad Media era peligroso disentir. Las personas de creencias teológicas o religiosas distintas al cristianismo eran consideradas herejes. Por tanto, los musulmanes, los judíos y los ateos se encontraban en una situación delicada.

Las torturas de la Inquisición para extraer las confesiones eran atroces e incluían el “aplastapulgares”, un dispositivo de hierro que se regulaba para destruir los dedos o el "toro de Falaris", que era un toro de bronce en el que se introducía una persona y luego se encendía una inmensa fogata. También estaba el potro, rueda de hierro a la que se ataba una persona y luego se tiraba de las ligaduras hasta dislocarle todas las articulaciones.

Una vez conseguida “la confesión”, por cualquiera de estos métodos, los herejes eran quemados en la hoguera.

#1 Por envenenamiento alimentario

La higiene no era un hábito muy desarrollado en la Edad Media: entre muchos otros factores, las personas no se lavaban las manos antes de preparar los alimentos, lo que provocaba la contaminación.

También se producían intoxicaciones por comer pan de centeno contaminado por el hongo cornezuelo que provocaba ergotismo, así como por no cocinar adecuadamente los alimentos.

En la Edad Media, vivir era desafiar a la muerte de forma constante, ¿no te parece?

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