El renombrado emprendedor Elon Musk acaba de hacer un anuncio que representa el primer paso del próximo capítulo de las exploraciones espaciales en la historia de la humanidad. Desde anoche, el famoso innovador y empresario había levantado expectativas con un post en su cuenta de Twitter diciendo que haría un importante anuncio hoy a las 4:00 p.m. hora del este de Estados Unidos.
Elon Musk anuncia un proyecto sin precedentes y se inicia una nueva etapa en la historia de los vuelos espaciales
Por:Univision
SpaceX announcement tomorrow at 1pm PST
— Elon Musk (@elonmusk) February 27, 2017
A este post le siguió otro hoy después del anuncio oficial confirmando que la compañía que Musk preside, SpaceX, enviará a dos civiles en una misión a la Luna, algo que no tiene precedentes en la historia de los vuelos espaciales. No existe una fecha exacta para el lanzamiento todavía pero, según el sitio oficial de SpaceX, la misión se llevará a cabo a finales de 2018.
Fly me to the moon ... Okhttps://t.co/6QT8m5SHwn
— Elon Musk (@elonmusk) February 27, 2017
Será la primera vez que dos civiles realicen un vuelo alrededor de la Luna como hicieran los astronautas a bordo del Apollo 13 sin la compañía de ningún piloto, técnico o tripulante profesional de SpaceX. Musk ha dicho que ambas personas comenzarán pronto los exámenes médicos para luego comenzar el entrenamiento si no hay ningún contratiempo de salud. Los futuros pasajeros, de los cuales no se han dado a conocer los nombres, ya adelantaron una suma sustancial de dinero como parte del pago por el viaje.
La expedición se realizará en la capsula Dragon 2, la cual será propulsada por el cohete Falcon Heavy. Se trata del segundo cohete más potente capaz de volar a la Luna detrás del Saturn V con unos 5 millones de libras de empuje de despegue. El Dragon 2 volará este año a la Estación Espacial Internacional sin tripulación a bordo como parte de los vuelos de prueba.
La mayor parte de los fondos para costear la fabricación del Dragon 2 provienen del programa Commercial Crew Program de la NASA, lo cual equivale a decir que los fondos provienen del bolsillo de los contribuyentes. No se ha dicho aún el precio que estas personas le van a pagar a SpaceX por el viaje, pero es muy probable que no llegue a los miles de millones que cuesta el proyecto en su totalidad. Por lo cual cabe preguntarse hasta qué punto los contribuyentes deben costear las operaciones de una compañía privada, aún cuando este tipo de proyectos abra las puertas hacia el futuro de los vuelos espaciales.