Cuando éramos niños teníamos todo tipo de intereses generalmente relacionados con juegos. Algunos queríamos ser astronautas, otros jugaban a ser futbolistas, pero muchos otros niños estaban interesados en los dinosaurios. Eso no significa que de grande se hayan vuelto paleontólogos, pero sí marca según los científicos una característica positiva.
El príncipe George ama los dinosaurios y eso lo hace más listo, ¿sabes por qué?
Por:Univision
El príncipe George es uno de ellos, como describió el príncipe William durante una visita al Hospicio para Niños Acorns. Según parece sus padres están aprendiendo de las diferentes especies gracias a él.
Prince George is obsesssd with dinosaurs, says Prince William. We’ve been learning all about them. That’s a rite of passage for every mother/father of boys! @AcornsHospice pic.twitter.com/562mYGJK6M
— Rebecca English (@RE_DailyMail) September 18, 2018
Muchos niños se obsesionan a edad temprana con los dinosaurios, aprenden sus nombres, qué comían, dónde estaban y nunca paran de conocer más sobre ellos. Esto es beneficioso para el cerebro de un infante y los vuelve más inteligentes.
Son «intereses intensos»
Así los llaman los científicos de la Universidad de Queensland, quienes dicen que además de los dinosaurios, otras cosas como autos y aviones también pueden estar en la lista de obsesiones a corta edad, generalmente entre los 2 y 6 años.
Pero este interés no dura demasiado tiempo: entre seis meses y tres años, según los investigadores. Entrar en un ámbito formal de educación es en gran parte el culpable. Las escuelas exigen prestar atención a varias materias, descuidando el interés específico, eso en lo que el niño es experto. No queda espacio para la especialización.
Otro estudio publicado en la revista Cognitive Development dice que los intereses intensos a corta edad generan una mayor atención, conocimiento y habilidades para procesar información. Cuando ese interés dura más tiempo, puede generar una inteligencia por encima del promedio. Pero la mayoría de los niños abandonan ese interés gradualmente, cuando consiguen amigos o sus padres comienzan a enfocarse en sus logros sociales y no tanto en cuántos dinosaurios puede nombrar.
Lo importante es que es una etapa muy interesante para el niño y muchos adultos recuerdan con cariño esos momentos. Quizás hoy no sepas todos los nombres de dinosaurios, pero fue beneficioso para tu crecimiento y aprendizaje.
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