El impulsor de la realidad virtual financia "secretamente" una campaña anti-Hillary

La campaña de Donald Trump parece ahora involucrar a un personaje que no muchos se hubiesen imaginado, y de una forma que ciertamente resulta curiosa, aunque propia de alguien tan asociado a las nuevas tecnologías y el uso de internet. Es que, cuando nadie lo esperaba, Palmer Luckey, el fundador de la empresa Oculus VR y creador de las gafas de realidad virtual Oculus Rift, aparece como uno de los responsables financieros de un grupo llamado Nimble America, dedicado a realizar campañas contra Hillary Clinton en diferentes medios de internet como redes sociales o foros de debate.

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El método de trabajo de Nimble America resulta bastante chocante para los medios convencionales, pero se adapta a lo que más efecto tiene en la actualidad: más allá de los carteles en vía pública que ya son clásicos en campañas electorales, su punto fuerte son las críticas, memes y comentarios virales a través de medios masivos ubicados entre los principales formadores de opinión... porque aunque a algunos todavía les cueste creerlo, hoy en día influye más un post en reddit o un tweet que lo que pueda decir un especialista por TV. Quizás por estos métodos, que no tienen límites y apelan incluso lo conocido como "shitposting" (críticas destructivas —desmesuradas, con insultos y burlas—, spam, comentarios que buscan desvirtuar la discusión o cuentas falsas creadas para comentar/votar negativamente los posts sobre Clinton y hacer lo contrario con los que favorezcan a Donald Trump), Palmer Luckey ocultaba su identidad a través de un alterego: "NimbleRichMan".

Ante la acusación, que partió desde la publicación The Daily Beast, Luckey reconoció ser "NimbleRichMan", alegando algo así como: "el dinero no me es problema, tengo muchísimo. Me pareció que sonaba divertido". Es que obviamente, dinero es lo que le sobra a este millonario desarrollador, con la venta de su empresa Oculus VR a Facebook por 2.000 millones de dólares y el valor de un producto como el Oculus Rift, vanguardia en la realidad virtual que inició este año su venta al público.

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No obstante, la comunidad se le ha vuelto en contra y ahora muchos de sus clientes han confirmado perder el interés en el producto por estas prácticas y otros motivos políticos, inclinándose hacia su competidor, HTC Vive. Otros, lejos de importarles la realidad virtual, simplemente ven a Luckey como otro millonario que colabora con el tan odiado Donald Trump, y aprovechan el revuelo para burlarse en las redes sociales tal como lo hacía Nimble America.

Por ahora la noticia está en pañales, pero además de ver cómo afecta esto a la campaña de Trump, a muchos nos suena todavía más interesante ver cómo esto afecta la imagen pública de Palmer Luckey, y las ventas de los productos Oculus VR.