Cuando pensamos en un conflicto bélico lo primero que se nos viene a la mente es la pérdida de vidas humanas. Esta es, sin duda, la mayor tragedia. Sin embargo, no se termina ahí. Las guerras dejan como consecuencia capas y capas de secuelas.
El horror cultural: 10 monumentos sirios que ya no podrás conocer

Estas catástrofes culturales no son nuevas. Desde el incendio de la Biblioteca de Alejandría hasta la quema de libros perpetrada por los nazis, son incontables los ejemplos que la historia nos proporciona.
Una vez más, la historia se repite. En esta lista, repasaremos cuáles son los 10 monumentos sirios que fueron destruidos como consecuencia del conflicto armado y que ya no podrás conocer.
1. Palmira

La Unesco se refirió a ella como «un oasis en el desierto sirio» y la declaró patrimonio de la humanidad en 1980. La ciudad fue construida 2 milenios antes del nacimiento de Cristo y condensó influencias de las arquitecturas griegas, romanas y persas. Esto la hacía un insumo único para conocer esos períodos históricos, así como el diálogo entre civilizaciones.
2. El casco histórico de Bosra

Esta ciudad se ubica a 150 km de Damasco y permanece habitada desde hace 2500 años. Su casco histórico, que contiene un teatro romano que data del siglo II, se mantuvo en pie hasta el actual conflicto. En la actualidad, la zona se encuentra severamente dañada como consecuencia de los bombardeos.
3. Gran Mezquita de Alepo

Era una de las mezquitas más antiguas del mundo. Fue construida por el Califato de los Omeyas en el año 715, aunque sufrió sucesivas reformas. La más significativa de ellas fue la construcción de su alimar (torre) en el siglo XI. Esta última fue reducida a escombros durante la guerra civil siria en 2013. Además, otras áreas de la mezquita sufrieron graves daños durante el conflicto.
4. Norias de Hama

Estos molinos de 20 metros de altura fueron construidos en siglo V y representan una de las primeras obras de ingeniería para el aprovechamiento de la energía hidráulica. Conformaba la principal atracción turística de la ciudad de Hama. Hasta 2014, 17 molinos de madera permanecían en pie. Sin embargo, expertos en el área aseguran que en ese año muchos de ellos fueron incendiados.
5. La ciudadela de Alepo

Constituía uno de los principales atractivos turísticos de Siria. La fortaleza fue construida hace más de 4 milenios, en la época de Alejandro Magno. Durante el actual conflicto, la ciudadela es utilizada como base militar y muchos de sus edificios históricos han sido destruidos.
6. El zoco Al-Medina de Alepo

Se trata de un mercado cubierto ubicado en el corazón de Alepo. Estas galerías fueron el escenario de luchas armadas que lo dejaron en un estado irreconocible. La Unesco catalogó esta pérdida como una tragedia.
7. El puente colgante de Deir ez-Zor

Este puente fue construido por los franceses en 1927 y funcionaba como un pasaje peatonal con hermosas vistas al río Éufrates. Lamentablemente, el puente colapsó en 2013 debido a los bombardeos.
8. Krac des Chevaliers

Este castillo fue construido durante el siglo XI y funcionó como sede central de la Orden del Hospital de San Juan de Jerusalén durante las cruzadas. La edificación fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco en 2006. Eso no impidió que sufriera graves daños en 2013, debido a los bombardeos aéreos y de artillería, así como su posterior ocupación por parte de los rebeldes.
9. Mezquita Khaled Ibn Walid

Ahora en ruinas, una vez fue una de las mezquitas más famosas de influencia otomana. Al mismo tiempo, el templo tenía trazos de influencias mamelucas, por medio de los juegos de luces y sombras. Su mausoleo fue totalmente destruido durante el conflicto y el interior del edificio fue quemado.
10. Museo del genocidio armenio

Este museo rendía tributo al millón y medio de ciudadanos armenios que fueron asesinados entre 1915 y 1923, en lo que es conocido como el genocidio armenio. Ubicado en la ciudad de Deir ez-Zor, constituía uno de los principales destinos de las peregrinaciones. El complejo, que incluía una iglesia, además del museo, fue destruido por ISIS en 2014.
Conocer nuestra historia es vital para no repetir los errores del pasado. Debemos tomar consciencia del alcance que estas pérdidas tienen en el patrimonio histórico de la humanidad para que las generaciones futuras no tengan que lamentar nuevas catástrofes culturales.
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