Ya han pasado cinco de las candidatas que buscan convertirse en una de las 7 maravillas del mundo moderno y ahora llega la sexta de las aspirantes que el 7 de julio próximo sabrán si han sido elegidas o no por la humanidad para representar su genialidad. Es el caso de El Cristo Redentor en Río de Janeiro.
El Cristo Redentor, con los brazos abiertos al mundo
Por:Univision
Imagen thinkstock
Si bien muchas de las construcciones concursantes tienen un fundamento religioso tal vez sea esta quién más representa la religiosidad para el mundo occidental. Sin embargo su significado ha variado a través de los años y parece ampliarse cada vez más.
El Cristo Redentor está ubicado en la cima de la montaña del Corcovado, un morro de unos 670 metros de altura. La construcción de esta estatua gigante se realizó a partir del año 1922 cuando fue colocada la primera piedra y recién se inaguró en 1931, convirtiendose así en una de las más jóvenes aspirantes a Maravilla del Mundo Moderno.
La estructura del Cristo con los brazos abiertos se alza 38 metros sobre la cima del Corcovado y la distancia entre los extremos de sus manos tendidas es de 28 metros. La iluminación de la estatua ha sido refaccionada varias veces y ahora luce moderna e impactante. Para llegar al mirador que se encuentra a sus pies el visitante deberá realizar un gran "peregrinaje" por interminables escaleras (ahora suavisado por un tramo de escaleras mecánicas.
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Millones de turistas visitan el monumento año a año, convirtiéndolo no solo en un santuario religioso (aqui podéis casarse o bautizarse) sino en una bienvenida a los vistantes y viajeros de todo el mundo.
El Cristo que redime, que acoge y que perdona fue planeado por un brasilero llamado Heitor Da Silva Costa y creado por el francés Paul Landowski. Tiene un estilo principalmente Art Decó lo cual lo diferencia rotundamente de sus competidores.
Para la UNESCO y para toda la organización del concurso que decidirá cuales son las 7 Maravillas del Mundo Moderno, El Cristo Redentor es un símbolo de la cordialidad y del acogimiento, no solo del pueblo del Brasil, sino del ser humano como tal.
El próximo viernes conoce más sobre otra de las candidatas: los Moais de la famosa Isla de Pascua, Chile.