Ubicado en el Océano Ártico, Svalbard es un archipiélago que constituye gran parte del norte de Noruega, entre el continente y el Polo Norte. Esta región se caracteriza por tener un grupo de islas relativamente grandes, con Spitsbergen siendo la mayor de ellas, seguida por Nordaustlandet y Edgeøya.
El archipiélago de Svalbard, una maravilla recóndita

El pasado de Svalbard se ve representado hoy en día en el centro administrativo que es Longyearbyen, la comunidad rusa de Barentsburg, el asentamiento de investigación de Ny-Ålesund, y la colonia minera de Sveagruva. A Svalbard se lo considera uno de los lugares más seguros del planeta, ya que no se cometen crímenes en absoluto.
Gran tesoro de hielo
Las islas fueron parte de una base pesquera entre los siglos XVII y XVIII, que pronto fueron abandonadas y reemplazadas por la minería de carbón al comienzo del siglo XX, lo que dio la oportunidad de que viniesen personas de todo el mundo a probar suerte en la próspera región, que en 1925 se hace parte oficial de Noruega.
Siendo zona libre de impuestos y desmilitarizada, Svalbard es conocida porque casi todo se relaciona a la investigación o al turismo, siendo hogar así del Centro Universitario de Svalbard y la Bóveda de Semillas Global de Svalbard. La única forma de acceso al archipiélago es mediante avión, aterrizando en el Aeropuerto Svalbard ubicado en Longyearbyen, y luego visitando por barco las demás islas.
Aunque tenga un clima muy frío, su relativa calidez comparada a otras regiones árticas hace que el archipiélago sea un lugar ideal para la crianza de especies vegetales y animales. La flora aprovecha la gran cantidad de sol de medianoche, mientras que a lo largo de las islas podemos avistar muchísimas aves marinas, renos, y osos polares.
La naturaleza es muy importante para los habitantes de Svalbard, quienes han creado siete parques nacionales y veintitrés reservas naturales para proteger los tesoros que se desarrollan en la región.
Naturaleza, honrada
Si no saben exactamente qué visitar primero, recomendamos pasar por Longyearbyen, ciudad que alberga gran parte de los centros culturales de la región, hoteles, e incluso muchas de las universidades del archipiélago.
Si el investigar es lo suyo, en Ny-Ålesund pueden recorrer todos los edificios institucionales que sean accesibles, ya que las autoridades noruegas han puesto límites a las visitas en la ciudad para minimizar el impacto que tiene el turismo en el trabajo científico.
Por supuesto, como mencionamos previamente, siempre se pueden visitar las reservas naturales y maravillarse ante las diferentes especies animales, tales como el bello zorro ártico, el reno de Svalbard, y la gran cantidad de osos polares (el símbolo del archipiélago, y una de las principales atracciones).
Además, más de la mitad del lugar está compuesta de glaciares, y en todas las islas podrán encontrar bellas montañas y fiordos, por lo que Svalbard es actualmente considerada Patrimonio Histórico de la Humanidad por la UNESCO y es, sin duda, una maravilla recóndita.
¿Qué les parece Svalbard? ¿Conocían sobre este archipiélago?







