En el año 2010 la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 30 de agosto como el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas.
Derechos Humanos: la importancia del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas

Según el sitio oficial de las Naciones Unidas:
"La desaparición forzada se ha usado a menudo como estrategia para infundir el terror en los ciudadanos. La sensación de inseguridad que esa práctica genera no se limita a los parientes próximos del desaparecido, sino que afecta a su comunidad y al conjunto de la sociedad".
Asimismo, las Naciones Unidas relevan un cambio de paradigma en torno a esta nefasta práctica. Si bien anteriormente la práctica era instrumentalizada principalmente por dictaduras militares, actualmente este tipo de violencia es ejercida en contextos muy variados que resultan generalmente de conflictos internos, con el objetivo de reprimir ciertos movimientos políticos. Además, se señala especialmente que dicha práctica no tiene un impacto solamente sobre la persona o sus familiares, sino que afecta a comunidades enteras.
¿Qué preocupa especialmente en el 2016?

"La injusticia en cualquier lado es una amenaza a la justicia en todos lados", frase de Martin Luther King.
En este año, las Naciones Unidas señalan sus preocupaciones principales en torno a este problema: el acoso que viven los defensores de los derechos humanos, así como también sus familiares y abogados, las distintas maneras en que ciertos estados usan a la lucha contra el terrorismo como excusa para vulnerar los derechos básicos de sus ciudadanos, y la impunidad de la que gozan quienes practican esta cobarde y opresiva forma de violencia.
En América Latina y España

Familiares de los 43 estudiantes desaparecidos en setiembre del 2014 en Iguala, México, marchan en Los Angeles para protestar el silencio del gobierno mexicano sobre lo sucedido.
En el año 2013, el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de la ONU viajó a España para supervisar el trabajo llevado a cabo por el gobierno en relación a la investigación de los crímenes cometidos por la dictadura franquista. El objetivo del grupo era el de determinar si España cumple o no con su obligación de establecer una verdad histórica sobre las numerosas violaciones a los derechos humanos cometidas durante el período franquista y de asegurar la reparación de las víctimas.
En América Latina, no solo existe la necesidad de verificar que las sistemáticas instancias de desaparición forzada de las dictaduras sudamericanas siguen siendo investigadas, sino que se trata igualmente de luchar contras las desapariciones forzadas que siguen ocurriendo en muchos países del continente.
Por ejemplo, según Amnistía Internacional, en México se han registrado más de 26 mil personas desaparecidas (entre el 2006 y el 2012). Además, la organización señala el rol jugado por el propio estado con el fin de minimizar estas estadísticas, lo cual claramente es muy preocupante. Mientras tanto, en Colombia, el conflicto con la guerrilla ha dado lugar a la desaparición de 61 mil personas, de las cuales se considera que más 18 mil fueron desaparecidas mediante intervención del estado.






