Durante la época del movimiento hippie los jóvenes europeos fascinados por Oriente comenzaron a trazar una ruta que arrancaba en ciudades como Londres o Amsterdam, atravesaba Oriente Medio y finalizaba en Tailandia, una versión alternativa de la ancestral Ruta de la Seda modificada tras la decadencia de aquella era y los problemas en el frente oriental, derivando en la conocida como Banana Pancake Trail, una ruta tan deliciosa como exótica que sacará a la mochilera aventurera que llevas dentro.
¿Cuál es la ruta viajera Banana Pancake Trail?


Tortitas, hippies y mochilas
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El conocido como Sendero Hippie nacía en ciudades como Londres o Amsterdam, puntos de partida que iniciaban una ruta en caravanas, autobuses o incluso apie a través de Europa hasta sumergirse en la belleza de los por entonces herméticos parajes de Europa del Este. De aquí, el camino pasaba por los bazares de Estanbul y de ahí a los exóticos escenarios de Oriente Medio, entre ellos por ciudades como Teherán o Kabul, umbral hacia Nepal y especialmente una India en la que el destino prioritario eran las playas de Goa, al oeste del subcontinente. A partir de aquí la ruta podía dividirse hacia Sri Lanka (la antigua Ceilán que Marco Polo describiera como la isla más bella del mundo) o continuar su marcha hasta Bangkok, desenlace de una ruta que se vería afectacta por la decadencia del movimiento hippie o la llegada de las tropas soviéticas a Afganistán a finales de los años 70.
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Antes del declive, el matrimonio formado por Maureen Wheeler (a la izquierda) y Tony Wheeler inició diversas rutas hacia el sudeste asiático desde Australia, escribiendo sus vivencias en diversos cuadernos que se convertirían en las primeras guías de cierta empresa llamada Lonely Planet la cual se convertiría en el referente de todo viajero durante los años venideros. Gracias a estas guías, los mochileros comenzaron a recomponer la vieja ruta hippie suprimiendo el tramo de Afganistán y utilizando Dubai como puente entre el norte de África y Nepal, la primera parada de esta nueva ruta que amplía el marco asiático gracias a todos esos lugares en los que la elaboración de tortitas de bananas se convirtió en código clave para pavimentar la ruta.
De este modo, de Nepal los mochileros suelen viajar hasta lugares de la India como Goa o Varanasi, de ahí a Sri Lanka y sucesivamente hasta Tailandia, Vietnam, Singapur, Malasia e incluso Filipinas, donde las islas de Palawan o Mindanao suponen el broche de oro a tan exótica ruta.

Obivamente esta Banana Pancake no obedecer a unos destinos concretos, pudiendo decantarnos por otros lugares como Birmania, Laos, Camboya, eso sí, entre hostels, fiestas de playa y mercados económicos a fin de respetar el alma mochilera de la ruta más deliciosa del mundo.
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Fuentes: conocimientos propios.
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La conocida como Banana Pancake Trail sustituye a la antigua ruta hippie venida a menos tras la difícil situación de Oriente Medio. Un sendero que puede convertirse en la perfecta opción a la hora de iniciar esa ansiada aventura hacia Oriente, fundirse con sus playas cristalinas o rezar en sus templos.
¿Te gustaría realizar esta ruta?







