Bolivia, muy cerca de las nubes

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En América del Sur, la región de Collasuyo, una de las cuatro grandes divisiones del Imperio de los Incas, fue denominada Alto Perú durante la dominación española de esas tierras; al proclamarse la Independencia el nuevo estado se llamó República de Bolívar, en homenaje a su libertador. Poco después tomó el nombre definitivo de Bolivia.

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Tierra de encantos singulares

Este gran territorio no cuenta con costas marítimas pero no por ello escatima bellezas geográficas. Ubicado sobre la cordillera de Los Andes, ésta al llegar a la Puna de Atacama se divide en dos ramales, la Occidental y la Real u Oriental, la gran meseta central que queda entre ellas es el Altiplano boliviano. Es allí que se levanta su ciudad capital, La Paz (sede del Gobierno), y otras importantes ciudades tales como Oruro, Cochabamba, Potosí y Sucre (su capital histórica).

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Es aquí donde Los Andes presentan algunas de sus mayores elevaciones, el Ancohuma, el Sajama, el Illampu, el Illimani y el Huayna Potosí todos de más de seis mil metros y el Ollagüe y el Tunari con 5.800 y 5.200 metros respectivamente.

Cuenta también con un volcán activo, el San Pedro y tiene varios ríos navegables, por ejemplo el Desaguadero que comunica dos de sus más grandes lagos, el Titicaca y el Poopó. Presentan sendas particularidades: el primero, ser el que está ubicado a mayor altura en el mundo (3.850 metros) y el segundo la de poseer agua salada.

El Lago Titicaca está en el límite entre Perú y Bolivia y dada su gran profundidad permite el paso de barcos de cientos de toneladas, siendo sus principales puertos el de Puno en Perú y el de Huaqui en Bolivia. Balsas típicas de la zona lo surcan y es agradable el colorido que le dan. La flora y la fauna de la región son un espectáculo aparte y el turismo que recorre sus kilómetros de costas llega de todo el mundo para admirar los alrededores.

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Un pequeño mundo

Hay también numerosas lagunas y al suroeste existen dos imponentes salares, el de Coipasa y el Gran Salar de Uyuni, una visita que no podemos dejar de efectuar porque es una de las maravillas naturales más impresionantes de nuestro planeta. El resto del país se reparte entre cultivos en los valles y zonas mineras en las montañas. Hay también bosques de las más diversas variedades de árboles, cedro, caoba, roble, nogal, laurel, quebracho y, al menos, una decena más de especies.

Entre los animales podremos encontrar los típicos de ambiente tropical como monos, jaguares, gatos monteses, coatíes, pecaríes, vizcachas y nutrias; y los de la meseta del Altiplano representados por camélidos tales como guanacos, llamas, alpacas y vicuñas. Muchísimas aves surcan el cielo, hay águilas, cóndores, gansos y somormujos entre otros.

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Una región peculiar donde no extrañaremos el mar porque nos ofrecerá tanta o más belleza para admirar que aquel. Ciudades de aspecto colonial, iglesias antiguas cuyas cúpulas sobresalen sobre el paisaje, y muchas fiestas religiosas donde se lucen los trajes zonales repletos de color y brillo. Es muy recomendable también visitar el sitio arqueológico de Tiahuanaco, al sur del Lago Titicaca, donde los restos de una increíble civilización sobrevivieron al paso del tiempo y se pueden admirar hoy sus gigantescos monolitos y construcciones de piedra.

Las artes populares nos maravillan con hilados, cerámicas y delicados trabajos en plata. Las danzas y los instrumentos musicales que utilizan, todo es para asombrarnos. Bolivia tiene mucho que brindar a quienes llegan a ella.

¿Han visitado Bolivia? ¿Cuál creen que es su mayor característica? 

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