Lisboa es ante todo la capital y la mayor ciudad de Portugal. Con sus siete colinas que dominan sobre El Tajo, Lisboa es un sitio turístico donde se mezcla el tiempo presente y las épocas pasadas. Ofrece su lado más modesto y dinámico con sus tiendas de moda y sus fiestas, pero también su lado secreto que desprenden los barrios más antiguos. A continuación, te invito a conocer los atractivos turísticos de Lisboa.
Atractivos turísticos de Lisboa
Lisboa, la puerta del infinito
La Lisboa de hoy en día es más moderna, con sus rehabilitaciones y sus construcciones realizadas para la Exposición Universal de 1998. Las casas blancas sobre las colinas han dejado sitio a casas de color pastel y ocre y a edificios más contemporáneos. La Praça do Comercio, la puerta de entrada de la ciudad, acoge a sus visitantes en cualquier época del año.
La primavera entre finales de abril y junio, y el comienzo del otoño entre septiembre y octubre son los mejores momentos del año para descubrir Lisboa. Durante la temporada turística de mediados de junio a septiembre, Lisboa acoge a muchos turistas, por eso se aconseja desplazarse con una reserva de hotel.

Los hoteles de Lisboa ofrecen confort, espacio y servicios de calidad, por unos precios algo elevados con relación a épocas anteriores. Para un confort mínimo, se puede elegir entre una habitación en una pensión por 50 euros la noche, y una habitación en la zona residencial, donde el precio es el mismo, pero sin restaurante.
También se puede optar por un hotel con encanto pero pagando como mínimo 100 euros la noche. Para una estancia de ensueño, se puede alquilar una habitación en un establecimiento de lujo llamado "posada" y que está situado en bonitos sitios turísticos de Lisboa. Para una estancia más prolongada, se puede alquilar un apartamento, o hacer una reserva en un albergue de juventud, o incluso en un camping.
Descubrir Lisboa a pie
Lisboa se descubre a pie para observar el espectáculo de sus calles. Pasear a lo largo de El Tajo, o comer en una callejuela es todo placer para cualquier turista. La ciudad reserva visitas culturales con sus museos, como el Museo Gulbenkian, el Museu do Azulejo o el Museu Nacional de Arte Antiga.
Para los noctámbulos, el centro cultural de Belém organiza espectáculos de danza y conciertos, las casas del Fado tienen fama por sus animaciones folclóricas.

En Lisboa, las actividades que se pueden realizar son enormes. Por ejemplo se puede salir de crucero por El Tajo para visitar el nuevo Ponte Vasco de Gama, o practicar algunos deportes como el golf, o el tenis, o ir de shopping para comprar ciertas piezas de artesanía: encaje, joyas, cestas de junco, juguetes de madera.
En resumen, Lisboa es una ciudad festiva con sus Fiestas de los Santos Populares durante el mes de junio, los desfiles y unas noches animada y coloristas en la Avenida de la Libertad, donde se pueden degustar las famosas sardinas asadas, o simplemente bailar al ritmo de las músicas populares.