Abramos los ojos: no estamos tan alejadas de las ''mujeres sobrantes'' de China

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Las mujeres en China huyen de sus familias para mudarse a una ciudad más grande y liberal donde no se sientan discriminadas por ser solteras. Así se da en varias partes de este país donde al parecer el valor de las mujeres se mide según su estado civil: aquellas mujeres con más de 27 años que todavía no se han casado son llamadas ''mujeres sobrantes'' ( "sheng nu" en chino).

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Es por eso que mujeres jóvenes deciden abandonar su hogar para poder vivir más cómodas y sentirse libres de hacer lo que quieren, en lugar de tener que soportar los juicios injustos que la sociedad les impone.

El mundo familiar

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Uno de los aspectos más preocupantes de todo este asunto es que las exigencias y prejuicios que más sufren estas mujeres provienen de sus padres. De hecho, no casarse es considerada una de las mayores faltas de respeto que la hija puede tener hacia sus padres. Las mujeres, entonces, tienen que soportar que sus padres les digan cosas como: ''No eres suficientemente hermosa, y es por eso que todavía no estás casada'' o ''No seas tan cruel conmigo'' o ''Es hora de arreglar el problema'', entre otros mensajes muy dolorosos.

Al parecer, la mujer no es quien puede decidir qué rumbo tomará su vida, sino que es la sociedad y sus padres quienes saben qué deben hacer con su futuro y la opción es solo una: contraer matrimonio (al parecer no importa con quién) antes de cumplir los 27 años.

Desde las altas esferas del gobierno

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Para hacer la situación aún peor, el gobierno de China también apoya esta alarmante forma de pensar. Desde que finalizó la política del hijo único en este país, el gobierno fomenta más que nunca la cultura de que las mujeres sin un hombre a su lado están incompletas.

Si bien es un valor que siempre estuvo muy arraigado a la cultura, lo diferente esta vez es que (por fortuna) hay muchas mujeres que se oponen a este estigma.

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Mercado matrimonial

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Un mercado matrimonial es un sitio donde padres avergonzados de sus hijas y desesperados por que contraigan matrimonio colocan un cartel con las características de su hija. Sí, esto es lo más parecido a vender a un hija.

En este caso, es evidente que lo que más priorizan es cumplir con lo que dicta la norma social, antes que ver a sus hijas felices. De nada importa si sus maridos las harán infelices, les gritarán, les pegarán o las someterán a cualquier otro tipo de maltrato, porque mientras estén casadas, todo irá ''bien''.

Tal vez no haya que culpar a los padres por esto, sino a la sociedad entera y al gobierno que promueve este tipo de actitudes. Por otro lado, es cierto que resulta muy difícil ver con ojos críticos la sociedad en la que nos criamos y que siempre nos dictó qué estaba bien y qué estaba mal.

De todos modos, un gran cambio se está gestando gracias a todas las mujeres que están armándose de valentía y animándose a decirle "sí" a su felicidad y "no" a una vida en matrimonio infeliz.

Luces de esperanza

Así lo hizo también una publicidad que muestra la ''toma'' del mercado matrimonial por parte de mujeres que se negaron a obedecer esta patética regla social. Gracias a su formación y al contacto con el exterior, ellas pueden asumir con tranquilidad que son seres independientes y que nadie más que ellas debe decidir cómo van a vivir sus vidas.

¿Desde cuándo necesitamos tener a alguien a nuestro lado para sentirnos seguras y conformes con nosotras mismas? Nadie niega que enamorarse y compartir nuestra vida con la persona que amamos nos reconforta, pero, ¿por qué deberíamos presionar a alguien para que se case con alguien que ni siquiera ama?

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Resulta frustrante y considero inadmisible que hoy en día sucedan este tipo de cosas. Y de seguro tú también estás pensando lo mismo que yo. Ahora bien, esta forma de pensar de China puede trasladarse al hemisferio occidental en una menor medida. ¡Las mujeres latinas no somos tan ajenas a esta realidad después de todo! Todavía solemos cuestionarnos por qué, por ejemplo, una mujer tan exitosa y joven no tiene pareja o relizar preguntas como: ''¿Todavía estás soltera?'' o ''¿Cuándo tendrás novio?''.

¡Seamos el cambio!

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Es hora de dejar de lado este estigma, ¿por qué no nos hacemos las mismas preguntas cuando vemos a un hombre soltero? Una mujer también tiene el derecho de optar por una vida soltera o de esperar hasta encontrar al hombre indicado. Es ridículo creer que algo funciona ''mal'' en una mujer porque no tiene pareja.

Contraer matrimonio es una opción, no una obligación y así debería ser visto aquí y en la China (literalmente). Es probable que aquellas personas que no comprendan por qué mucha gente está soltera no logren encontrar la felicidad en ellos mismos, y eso es sin dudas mucho más preocupante y cuestionable que no tener a alguien a nuestro lado. Porque si no logramos hacernos felices a nosotras mismas, puedo asegurarte que nadie más lo hará: la única persona que puede hacerte verdaderamente feliz eres tú misma.

Cada una halla la felicidad por diferentes caminos y creo que ser independiente y libre es uno de los más gratificantes y que el resto del mundo debería respetar. ¿No te parece?

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