¿Qué haríamos sin nuestras madres? Son seres superpoderosos, de eso no hay duda alguna.
8 frases célebres para dedicarle a tu madre

Nos traen al mundo, nos enseñan todo lo que necesitamos saber para sobrevivir, y nos acompañan durante toda nuestra vida.
Nos sostienen y alimentan cuando somos bebés, nos enseñan sobre la cultura cuando estamos creciendo, nos curan siempre que estamos enfermos/as, nos levantan cada vez que nos caemos y nos ayudan a encontrar nuestro camino en la vida...
Estas son solo algunas de las cosas que cada una de nuestras madres hacen por nosotros.
Para celebrar lo maravillosas que son las madre, es que te compartimos varias frases que resumen solo algunas características increíbles que tiene tu madre.
Las palabras tienen el poder increíble de transmitir nuestras emociones... elige la frase que más identifique a tu madre y compártela con ella.
8. Sobre su amor por ti

«No se dio cuenta de que un amor tan poderoso como el de tu madre hacia ti deja marcas poderosas. No una cicatriz, no un signo visible...Haber sido amado tan profundamente, aunque esa persona que nos amó no esté, nos deja para siempre una protección. Eso está en tu piel.»
J.K. Rowling
7. Sobre su ternura

«Jamás en la vida encontraréis ternura mejor y más desinteresada que la de vuestra madre».
Honoré de Balzac
6. Sobre lo increíbles que son

«Muchas maravillas hay en el universo; pero la obra maestra de la creación es el corazón materno».
Ernest Bersot
5. Sobre tu crianza

«Todo lo que soy o espero ser se lo debo a la angelical solicitud de mi madre».
Abraham Lincoln
4. Sobre el amor madre e hijo/a

«¿Cómo no amarte, madre, si me enseñaste a hablar
tu lengua? ¿Si soy viento nacido de tu roca?»
Gonzalo Rojas
3. Sobre su sonrisa

«El niño reconoce a la madre por la sonrisa».
León Tolstoi
2. Sobre su fuerza y determinación

«El amor de una madre es el combustible que hace que un ser humano logre lo imposible».
Marion Garretty
1. Sobre la palabra...

«Porque siento que en los cielos
los ángeles susurrándose entre sí
no encuentran entre sus ardientes palabras de amor
ninguna tan devota como la de madre».
Edgar Allen Poe







