7 rarísimas formas en las que la gente se protegía de la brujería

Desde la antigüedad, la gente supersticiosa ha inventado muchas formas para ponerse a salvo de las malvadas brujas; estas son 7 de las más curiosas y utilizadas.

PUBLICIDAD

1. Flechas de duendes

Imagen Shutterstock

Los campesinos escoceses creían que los elfos y las brujas disparaban sus flechas desde las nubes para liquidar el ganado y otros seres vivos. Aquel que podía apropiarse de una de estas flechas se hacía con el mejor talismán contra las brujerías. El problema es que las flechas eran buscadas insistentemente y nunca se encontraban.

2. Zapatos ocultos

Imagen Thinkstock

En el siglo XIII, los ingleses empezaron a ocultar viejos zapatos en escondites inusuales como vigas de techos, tablas de pisos y dentro de las paredes, como protección contra las brujas y otros espíritus malignos. Este calzado ha sido hallado en casas de la Edad Media, junto con otros objetos extraños, como esqueletos de gatos y cráneos de caballos.

3. Botellas de hechizos

Durante los siglos XVI y XVII se popularizaron en Inglaterra y Estados Unidos las botellas de brujas. Si temías el ataque de una bruja, tomabas una botella de cerámica y la llenabas de orina, pelo, clavos y alfileres. La botella representaba a la bruja y cuando la malvada intentaba hechizarte, los clavos y alfileres empezaban a pincharla y la desalentaban.

4. Sal

Imagen Thinkstock

La sal era uno de los bienes más preciados en la antigüedad y se usaba como protección contra los hechizos en seres humanos, ganado y otros animales. Se suponía que las brujas detestaban la sal y los torturadores de la Edad Media obligaban a las mujeres acusadas de hechicería a comer cosas muy saladas, negándoles el agua.

PUBLICIDAD

5. Encantos orales y escritos

Los encantos repelen o rompen los hechizos de las brujas. Pueden ser frases recitadas o textos escritos que se llevan en un bolsillo o se colocan en un lugar de la casa. Los encantos más populares han sido las oraciones más conocidas del Cristianismo, como el Padre Nuestro, el Credo y el Ave María.

6. Agua Bendita

Imagen Thinkstock

El agua bendecida por el sacerdote y colocada en una pila de la iglesia ha sido el arma más utilizada contra el demonio y sus seguidores, quienes serían alérgicos al líquido. Los animales domésticos también eran frotados con agua bendita para alejar los malos espíritus.

7. La silla de la bruja

Imagen Wikimedia Commons

Muchas viejas casas de la isla británica de Guernsey tienen un bloque de piedra que sobresale de la chimenea. Eran colocados para evitar filtraciones de agua de lluvia por la juntura entre el techo y la chimenea, pero pronto se les encontró otra curiosa utilidad. Cuando las brujas sobrevolaban los pueblos, se sentaban en estos bloques a tomar un descanso; si no encontraban asiento, entraban a la casa por la chimenea.