Odiseas más espectaculares que la que realizó Odiseo según el mito.
7 asombrosos viajes de supervivencia durante la Segunda Guerra Mundial

1. Casi 500 km en una balsa

Calvin Greaf y otros 4 soldados estadounidenses estaban como prisioneros de guerra en un barco japonés cuando la embarcación fue impactada por un torpedo. Los norteamericanos se lanzaron al agua en medio de la confusión e improvisaron una balsa. Navegaron 480 km hasta que fueron rescatados por unos pescadores chinos.
2. El robo del avión alemán (I)

El avión del teniente Kuznetsov, piloto soviético, fue derribado por un avión alemán. Kuznetsov pudo escapar antes de que su avión explotara, se escondió en la espesura y se sorprendió cuando vio a su enemigo aterrizar. El alemán empezó a hurgar en el avión destruido, como quien busca un suvenir, momentos que aprovechó el soviético para robarle su aeronave. El piloto de los soviets tuvo que esquivar el fuego de su propio bando antes de tomar tierra, ileso.
3. Marcha de 18 días

El piloto soviético Alexsei Maresyev fue derribado en una zona controlada por los alemanes. Herido, se arrastró por el bosque durante 18 días hasta que cruzó las líneas enemigas y llegó medio muerto a territorio soviético. Le amputaron ambas piernas para salvarle la vida y tiempo después andaba de nuevo volando con dos prótesis.
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4. Sangre de tiburón

El chino Poon Lim era camarero en un barco británico que iba hacia Surinam, oficio que le salvó la vida cuando la embarcación fue alcanzada por un torpedo alemán. Lim estaba en la cocina cuando el barco empezó a hundirse. Tomó varias raciones de comida y se lanzó al agua. Improvisó una balsa y empezó a navegar.
Tenía comida pero no agua y mataba tiburones con un cuchillo hecho con una lata de galletas, bebiendo sangre de escualo. Cazó un ave que se paró en la balsa y se la comió. Fue rescatado por pescadores brasileños tras una odisea de 133 días.
5. Una verdadera travesía

Slavomir Rawicz y otros 6 compañeros escaparon de un campo de prisioneros soviético en Siberia. Atravesaron el Ártico siberiano, cruzaron el Desierto de Gobi y viajaron por el Himalaya hasta que llegaron a salvo a India. Habían recorrido 6400 kilómetros y 3 de los 7 murieron en la travesía.
6. El robo del avión alemán (II)

El estadounidense Bob Hoober era prisionero en un campo alemán cuando halló la forma de robar un avión. Ya en el aire y con casi toda Europa en poder de los nazis, no sabía a dónde ir. Decidió aterrizar cerca de una granja para intentar sobrevivir escondido. Los granjeros daneses se dieron cuenta y estuvieron a punto de matarlo creyendo que era alemán.
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7. Nueve semanas en la nieve

El comando de la Resistencia noruega, Jan Baalsrud, iba en un barco cargado de explosivos que fue alcanzado por fuego alemán. Baalsrud se lanzó por la borda de inmediato, nadó por las heladas aguas del Ártico y pudo llegar a la orilla. Caminó por la nieve con una sola bota y un dedo se le gangrenó. Se cortó el dedo para que la gangrena no se esparciera. Estuvo 9 semanas viajando por la nieve hasta que encontró ayuda.







