Cada vez está más claro que las bacterias que se alojan en nuestros cuerpos afectan el organismo humano de una manera que nunca nos hubiéramos imaginado hasta hace poco.
6 asombrosos descubrimientos que la ciencia hizo sobre nuestra flora intestinal

1. La flora intestinal está relacionada con la pérdida de peso

Las personas obesas tienen menos microbioma que las sanas y la ciencia solo está empezando a entender por qué. Los estudios han demostrado que si se toman microbios de personas gordas y se ponen en ratones flacos, los roedores empiezan a engordar. «En cierto modo, es como si la obesidad fuese infecciosa» afirma el genetista epidemiológico del King's College de Londres, Tim Spector.
2. Podría utilizarse para aliviar condiciones psiquiátricas
Investigadores de la Escuela de Medicina Icahn de Nueva York descubrieron que la alteración de las bacterias intestinales podría ayudar a aliviar ciertas condiciones psiquiátricas. El estudio consistió en instalar bacterias intestinales de ratones deprimidos en ratones sanos, observándose cambios en la vaina de mielina en los cerebros de los roedores saludables, lo que modificó el funcionamiento de sus nervios. Como consecuencia, los ratones sanos empezaron a manifestar conductas de abstinencia social características de la depresión.
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3. Podría ser la causa de las migrañas

Un estudio realizado por la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad de San Diego, California, encontró que las personas que padecen de migraña tienen significativamente más microbios con la capacidad de descomponer nitratos, que el resto de la población. Los nitratos, que se encuentran en las carnes curadas, verduras de hoja y algunos quesos, pueden ocasionar una serie de cambios en los vasos sanguíneos, que a su vez producen la migraña.
4. El uso temprano de antibióticos puede afectar el microbioma de forma permanente

Un estudio de la Universidad de Helsinki determinó que el consumo de antibióticos en edad infantil podría alterar la población natural de microbios intestinales de una manera que incrementa los riesgos de padecer de obesidad y asma.
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5. Las bacterias se pueden utilizar para hacer terapias
Biólogos e ingenieros médicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts están reprogramando las bacterias intestinales para que actúen como «terapeutas vivas» corrigiendo las disfunciones metabólicas que subyacen en ciertas enfermedades.
6. Probablemente afecta el sueño y el jet lag

Especialistas de la Universidad Central de Queensland, Australia, establecieron que los patrones de sueño están misteriosamente relacionados con la salud intestinal. Actualmente están tratando de crear una píldora de bacterias para tratar el desfase horario.









