6 alocados y sorprendentes datos sobre la infancia de los niños incas

La civilización inca logró extenderse a Perú, Argentina, Chile, Ecuador y parte del sur de Colombia y fue una de las últimas civilizaciones precolombinas en conservar su estado independiente.

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Pero más allá de la forma de vida o los logros de esta civilización, ser un niño inca no era tan beneficioso, incluso podían tener una infancia muy dura.

#6 Obligaciones desde muy pequeños

Evidencias han demostrado que antes de los 9 años los niños incas ya sabían hacer un montón de tareas e incluso antes de los 5 aprendían a realizar tareas domésticas y elaborar cerveza.

Pero además debían mantenerse saludables para el matrimonio y las mujeres debían ser sumisas y mantenerse alejadas de los hombres hasta que les concertaran el matrimonio.

#5 Remojarse en orina

Si un niño estaba enfermo, la creencia inca sostenía que tenía que chupar el cordón umbilical (que sus padres guardaban).

Y además los que tenían fiebre los hacían remojarse en una bañera llena enteramente de orina de su familia, que se suponía que lo curaría.

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#4 Objetos de sacrificio

Al parecer los incas tenían un ritual al que llamaban capacocha, que consistía en sacrificar a los niños en la cumbre más alta de Perú para prevenir sequías y enfermedades 

Si bien podían elegir a cualquier sexo, la mayoría de los cadáveres encontrados por arqueólogos han sido de niñas. Se les daba alcohol y hojas de coca para beber.

Y las familias se sentían honradas cuando sus hijos eran elegidos como sacrificio para los dioses.

#3 La importancia de la vestimenta

A los 14 años, los niños incas cambiaban su ropa y usan taparrabos como símbolo de su masculinidad. Sobre todo porque los niños podían casarse en su adolescencia.

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A esa edad también se ponían tapones grandes en los lóbulos de las orejas y con el peso del años iban aumentando el tamaño para estirar las orejas. 

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#2 Cráneos deformado

Los incas tenían la costumbre de envolver las cabezas de los niños para deformar sus cráneos y que parezcan conos. 

Hacían eso porque creían que cuanto más arriba estaba la cabeza, más alta la mente y por ende podían estar más cerca de sus dioses.

Otras civilizaciones antiguas como los mayas también realizaban esta terrible práctica.

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#1 El matrimonio como negocio

Los niños inca tenían contacto con el sexo y el matrimonio desde muy jóvenes. Las niñas se casaban entre los 12 y los 14 años. Pero hay evidencia de ritos sexuales de todo tipo desde pequeños.

En el caso de los hombres, se casaban alrededor de los 20 años. Sin embargo, las ceremonias matrimoniales eran más un negocio o acuerdo entre familias que una celebración.

Sin duda la infancia de los incas no era nada sencilla, se sometían a sacrificios, prácticas asquerosas y se los hacía madurar de forma temprana asumiendo todo tipo de responsabilidades. ¿Te lo esperabas?