Suele ser una de las situaciones más irritantes (y cómicas en según qué casos) durante un viaje: conseguir cerrar bien la maleta cuando nos disponemos a regresar a casa.
5 tips de oro para que entre todo en la maleta al volver

Una típica situación no exenta de alguna que otra risa y unos cuantos bufidos según nuestros ánimos, y que invitamos a resolver de forma más eficiente mediante estas 5 tips para que entre todo en la maleta al volver.

5. Abandona los "por si acaso"
El trabajo para conseguir cerrar bien la maleta al partir comienza antes de llegar a un destino que, al no conocer, siempre nos impulsa a llevar con nosotros diversos elementos que cargamos "por si acaso".
Valora realmente la importancia de esa camiseta o el secador de pelo durante una escapada de tres días, consulta el clima del país antes de partir y procura empacar los productos de higiene y cosmética en envases pequeños que te ahorren los controles del aeropuerto y espacio en la maleta.
Si te dispones a viajar de mochilera, olvídate de empacar estas cosas

4. Cuando tu maleta es un Tetris
Recuerda aquellos años de la infancia en la que pasabas horas jugando al Tetris y aplícalo a la hora de encajar cada una de tus pertenencias de forma ordenada en la maleta.
La excepción del lema "el orden de los factores no altera el producto" no es aplicable a una maleta de viaje, de modo que empieza empacando los elementos más grandes y flexibles para dejar paso a esos otros bártulos cuya correcta posición puede ahorrarte más de un suspiro al terminar de hacer la maleta.

3. Recicla y ordena
Coloca todos los folletos y documentación en una misma carpeta, los souvenirs en una misma bolsa, deshazte del bote de champú a punto de terminarse, consume la comida al momento y no la almacenes.
Aprende a desestimar los restos del viaje y a ordenar los que tienes del mejor modo.

2. Ten a mano lo esencial
Puede que consigamos cerrar la maleta una primera vez pero el hecho de necesitar algo que guardamos de camino al aeropuerto nos conduzca a esa indeseable situación en la que nos veamos obligados a intentar cerrarla de nuevo en el autobús o la terminal. Procura llevar contigo una mochila pequeña con todo lo esencial: billetera, llaves, documentación...
De este modo te olvidarás de volver a abrir la maleta e intentar cerrarla a duras penas.

1. Abrigos que no caben
Si vas a realizar una escapada, procura llevar sólo un abrigo. Viajando en invierno, las prendas son más gruesas y las maletas más difíciles de cerrar, por lo que ser selectiva en esta temporada es esencial. En caso de abandonar un país de bajas temperaturas viste con las prendas más gruesas al salir del hotel, un modo útil de ahorrarte complicaciones sabiendo que podrás desprenderte de esa chaqueta o jersey cuando el avión despegue.
Para encontrarlas fácilmente: 7 formas divertidas de identificar tus maletas
Estas 5 reglas de oro para que entre todo en la maleta al volver obedecen a la lógica y la determinación para reconocer qué necesitamos y qué no cuando viajamos. Recuerda que empacar eficientemente antes de viajar es el mejor modo de ahorrarte futuras peleas con la cremallera de la maleta.
¿Te has encontrado con el problema de no poder cerrar la maleta cuando viajas?







