5 prisiones del mundo tan agradables que parecen centros vacacionales

Perder la libertad es una de las peores cosas que le pueden pasar una persona, pero quienes cometen delitos deben aceptar su castigo y pagar por sus crímenes en alguna de las miles y miles de cárceles que existen en el mundo.

¿Sobrepoblación, motines, mala comida? Cosas comunes en las cárceles que conocemos, pero hay prisiones tan espectaculares que parecen centros vacacionales, tal como ocurre con estos 5 centros penitenciarios de lujo.

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5. Halden, Noruega

Celdas individuales con camas cómodas, sillones, baño privado, cocina, frigobar y televisor, todas iluminadas por el sol gracias a sus ventanas sin barrotes. No es una habitación de hotel sino que la prisión Halden en Noruega.

Esta cárcel de lujo entrega una serie de comodidades a sus internos, los que pueden pasar sus días aprendiendo oficios, ejercitándose en su gimnasio y muro de escalada, haciendo música en una sala especial o cultivándose en su completa biblioteca.

En la prisión de Halden, famosa por ser la más humana en su tipo, los guardias no llevan armas ya que lo consideran innecesario.

 Sus instalaciones fueron especialmente diseñadas para parecerse al mundo real. Al terminar su condena, los reos llenan un cuestionario con sugerencias acerca de qué podría mejorar en esta prisión modelo.

4. Duluth Camp, Estados Unidos

Una prisión federal para reos de mínima peligrosidad que más que una cárcel parece un campamento de verano. El Duluth Camp en Estados Unidos promete mantener entretenidos a sus presos.

Los internos tienen acceso a clases de música con todo tipo de instrumentos, pueden aprender oficios e incluso salir a trabajar durante el día a un pueblo cercano, En vez de celdas, el Duluth Camp posee dormitorios muy al estilo de los universitarios y las rejas casi no se ven.

Una prisión muy diferente al resto de los centros penitenciaros de Estados Unidos y donde los internos la pasan bastante bien evitando que sientan el encierro.

3. Bastoy, Noruega

Tomar sol, realizar cabalgatas y estar en contacto con la naturaleza en una hermosa isla. Así es la vida de los internos en la cárcel noruega de Bastoy, donde los presos viven en cabañas y trabajan en granjas.

Durante su tiempo libre los presos pueden jugar tenis y fútbol en canchas completamente equipadas, pescar, darse baños de sol y mar en verano, entre otras cosas que más la hacen parecer un resort de vacaciones y no una prisión.

2. Centro de Justicia Leoben, Austria

Más que una cárcel, el Centro de Justicia Leoben en Austria parece un lujoso edificio con instalaciones como cancha de baloncesto, gimnasio muy completo y grandes ventanales por donde entra la luz del sol, entre otras amenidades.

Cada interno tiene una celda propia con baño privado, televisión, mini cocina e incluso un balcón para salir a tomar aire, acá no hay rejas y los reos pueden ir de «habitación en habitación» sin restricciones más allá de respetar a sus compañeros.

1. Prisión Aranjuez , España

Estar preso supone separarse de la familia, lo que es peor cuando se es padre o madre, en España hay una cárcel especial para los reclusos que no tienen con quién dejar a sus hijos.

La Prisión de Aranjuez posee módulos especiales para prisioneros con hijos menores de tres años o en los que padre y madre están recluidos, permitiendo que reos compartan durante el día con los niños en un ambiente sano.

Gracias al trabajo de varias ONG en la prisión de Aranjuez los niños están en salas decoradas con hermosos murales, llenas de juguetes y bajo el cuidado de especialistas que además los estimulan. Sus padres pueden pasar el día entero con ellos lo que ayuda a formar lazos y aprender de paternidad o maternidad responsable.

Centros penitenciarios ejemplares y donde los presos pueden concentrarse en su rehabilitación, todo mientras están cómodos, bien alimentados y con espacios de esparcimiento que ya nos gustaría tener a nuestra disposición.

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