20 jugadoras y una denuncia de violencia de género: ¿este es el fútbol que queremos?

La violencia en el fútbol es una triste realidad, desde hinchadas que se enfrentan hasta los padres en el baby fútbol que les exigen a sus hijos todo y más, mientras se deshacen en insultos hacia el entrenador.

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Ahora, 20 jugadoras del plantel de fútbol femenino de Nacional escribieron una carta a la directiva del cuadro manifestando que se alejarán de la institución por discrepancias con el entrenador del equipo, Ignacio Chitnisky.

¿Cuáles son esas discrepancias? 

Las jugadoras denuncian que el entrenador no ha participado de un 90 % de las prácticas, que armaba el cuadro basándose en la afinidad que tenía con las jugadoras, y los más fuerte de todo: que, según las jugadoras, ofreció 100 dólares por quebrar a una jugadora rival y que se ha burlado del aspecto físico de las jugadoras, mostrando conductas de violencia de género.

Muchos, al enterarse, pensaron que era algo "normal" en el fútbol bromear con hacerle algo a un rival contrincante, o incluso hacer “bromas” para motivar a los jugadores. Mi pregunta es: ¿es esto lo que queremos para nuestro fútbol?

Claras y firmes en su visión

Las jugadoras escribieron en la carta que no quieren dejar el club del que son hinchas, en el que conviven con sus compañeras y amigas desde hace años, y en el que tienen posibilidades de crecer futbolísticamente, pero que lo harán si continúa Ignacio Chitnisky en el plantel. 

La presidenta del fútbol femenino de Nacional confirmó su apoyo a la continuidad del entrenador y fue acusada por parte de las jugadoras de reírse del tema durante la reunión. 

Más allá de la veracidad las acusaciones, y sea cual sea la resolución final de la Directiva, no tomar el tema con la seriedad que amerita es solo un indicativo más de cómo la violencia y el bullying en el fútbol siguen siendo moneda corriente.

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Violencia y punto

Sin duda, este tipo de problemáticas indignan todavía más, al constatar que, aun después de todo lo que se ha hecho a nivel de género para incluir a las mujeres en el ámbito deportivo, existan conductas que las menosprecien por ser mujeres o por tener tal o cual físico. En este sentido, sin duda alguna, todavía nos queda mucho por crecer como sociedad.

Sean mujeres, niños u hombres, el deporte debe fomentar la inclusión, el trabajo en equipo y la superación personal y grupal.

A mí me gustaría que el tema se tome con la seriedad necesaria. Que el entrenador aparezca para dar su visión de la historia. Y que, de ser necesario, pueda pedir las disculpas correspondientes a esas chicas que entrenaron duro y dieron lo máximo de sí para sacar adelante a su cuadro.

¿Y a vos?