La mayoría de las personas te dirá que les gustaría morir mientras duermen y luego de haber vivido una existencia plena, pero no es posible elegir. Hay muertes más terribles que otras y hoy vamos a contarte sobre algunos de los accidentes mortales más extraños de la historia.
10 accidentes mortales terriblemente extraños de la historia que tienes que conocer

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10. Asesinado por ovejas hambrientas

Las ovejas nos parecen de lo más pacificas, pero cuando tienen ganas de comer nada las detiene. Una granjera decidió salir a alimentar a sus ovejas y para ello puso el alimento en la parte de atrás de su moto para llevarla a destino. Las hambrientas ovejas no aguantaron y se lanzaron al alimento que todavía estaba en la moto. La granjera sobrevivió la caída, pero su moto se le abalanzó encima causándole la muerte.
9. La muerte más dulce de todas

Si no te gusta el chocolate, puede que vengas de otro planeta. Este dulce manjar es irresistible, aunque para Vincent Smith II resultó fatal. Este hombre trabajaba en una fábrica de chocolates, cuando cayó a un tanque lleno de chocolate derretido a un temperatura de 50º C, siendo además golpeado por las paletas que revolvían el líquido. Una muerte dulce pero terrible a la vez.
8. Muerte por repetición

Si una persona querida murió en un desafortunado accidente, imitarlo no es buena idea. Una mujer tailandesa se resbaló en el barro y al intentar no caer al suelo, se tomó de un cable eléctrico, falleciendo electrocutada. Su hermana, al querer mostrar cómo murió, resbaló también en el barro y olvidó que un porrazo era mejor que tomarse de un cable para no caer, sufriendo una muerte idéntica a la de su querida familiar.
7. Cuidado con tu bufanda

Nos protegen del frío y son un estupendo accesorio, pero las bufandas pueden causarte la muerte, a menos eso le pasó a la bailarina Isadora Duncan. Esta conocida artista subió a un vehículo sin darse cuenta que su larga bufanda había quedado colgando. Cuando el coche se puso en movimiento, la bufanda se enganchó en una rueda, lo que terminó por romperle el cuello y matarla.
6. Un suicidio que mata a otro

En España, una mujer decidió terminar con su vida saltando del octavo piso de un edificio, sin saber que no solo terminaría con su vida. Al saltar, cayó sobre un peatón que iba caminando, provocando el fallecimiento de ambos. La esposa del fallecido, escapó con algunas heridas.
5. Comer hasta morir

Hay gente que muere de hambre y, otros que tienen problemas por comer demasiado. Ese era el caso del Rey Adolf Frederick de Suecia. Este glotón se dio un festín de langosta, caviar, chucrút, sopa de repollo y arenques ahumados, bajando todo con un par de copas de champagne. Pero su problema estaba en la debilidad por los dulces, ya que comió 14 postres. Ese exceso de comida, le causó la muerte por problemas en su digestión.
4. La barba asesina

Hans Steininger era un austriaco famoso por su larga barba, que era su orgullo, pero también terminó siendo su verdugo. Al salir apurado de su casa, olvidó enrollar su larga barca, tropezando con ella y rompiéndose el cuello al caer. Mejor afeitado que muerto.
3. Sexo seguro, hombre tonto

Si se quiere practicar sexo seguro, el condón ofrece la protección necesaria, pero a Gary Ashbrook nadie le explicó la forma correcta de utilizarlo. Este hombre de 31 años, murió sofocado por un condón en su cabeza, el que había inflado con oxido nitroso. Ashbrook también era VIH positivo; el mal uso del condón lo traicionó dos veces.
2. El robot asesino

Robert Williams trató de quitar una pieza defectuosa de la línea de ensamblaje de la planta de Ford, apagando para ello los robots que realizan el trabajo. De la nada, un robot se activó y con su fuerte brazo mecánico, le golpeó en la cabeza, causando su inmediata muerte. Este hombre pasó a la historia al ser el primero en ser asesinado por un robot.
1. La venganza del cactus

Los cactus son plantas temperamentales y así lo aprendió un David Grundman, que se llevó la lección a la tumba. Este hombre de 27 años salió a dispararle a un cactus en el desierto, aunque no esperaba que un cactus de 8 metros le cayera encima, muriendo aplastado. Nunca te metas con un cactus, podrías terminar muy mal.
Estas 10 muertes extrañas eran evitables, pero pasaron a la historia por ser bizarras. Por lo menos aprendimos que, cosas cotidianas pueden matarnos si nos la hacemos bien y tenemos muy mala suerte.
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