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¿Quién se queda con el perro? Lo que tienes que hacer con las mascotas después de una ruptura

Las separaciones nunca son agradables. No solo pierdes una persona que significó mucho para ti, sino que también se pueden ir algunos amigos o familiares de tu ex, y ni hablemos de lo que sucede cuando hay niños de por medio. Pero, hay una parte de la familia que rara vez se discute cuando se habla de rupturas amorosas: las mascotas. 

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¿Qué puedes hacer con tu mascota cuando te separas de tu pareja? No hay un protocolo para seguir, ningún juez puede intermediar y hacer que el gato viaje todos los fines de semana a visitar a su dueño, pero sí hay algunas cosas que puedes tener en cuenta de  cómo lidiar con las mascotas en una separación

1. ¿Quién lo tuvo primero?

Si adoptaste un animal antes de conocer a tu pareja, entonces te pertenece a ti y a nadie más. Si las cosas se ponen feas y tu ex reclama tu mascota por la vía legal, puedes demostrar que es tuyo con su carnet de vacunas o por los documentos que muchos refugios piden para dar animales en adopción. 

Los perros y gatos son como hijos para los dueños, pero a los ojos de la ley son propiedad y el único que puede quedarse con ellos después de una separación es el que ya los tenía antes de la unión.

2. Si hay niños de por medio...

Imagen Thinkstock

La separación de los padres ya es muy difícil para los niños y si, además de eso, pierden a su mascota, puede ser aún peor. Si el niño tiene un vínculo con su perro, entonces llevárselo puede hacer que su mundo sea un poco más inestable.

3. ¿Cuál de los dos tiene tiempo?

Si uno de ustedes trabaja 8 horas y, además, tiene 2 horas de viaje a su trabajo, entonces probablemente no tendrá mucho tiempo para dedicar al cuidado de la mascota. Desprenderse de un perro puede ser muy doloroso, pero es peor no poder tenerlo bien, así que si no tienes el tiempo para darle la atención que merece, quizás debas considerar dejarlo en manos de tu ex.

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4. ¿Quién se muda?

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Mudarse a un lugar nuevo puede ser una experiencia traumática para una mascota. Si uno de ustedes se va a quedar en el lugar que compartían, entonces puede ser una buena opción dejar a tu perro en la comodidad de su hogar

5. Compartirlo

Si la relación terminó de forma amigable quizás puedan encontrar una manera de compartir a su mascota, algo así como una  custodia compartida de un perro. Por supuesto, eso significa que tendrán que verse seguido por unos cuantos años, pero si no quieren hacerlo pueden compartir a su mascota por un corto tiempo hasta que, progresivamente, quede en manos de un solo dueño.

Las mascotas son como nuestros hijos y perderlos puede doler tanto como separarte de un amor, pero la vida es así, afortunadamente si tienes estas cosas en mente podrás asegurarte de que tu perro querido termine en las manos correctas.