¿Qué hacer si mi hija quiere una cirugía estética?

Los adolescentes se preocupan mucho por su imagen corporal, al punto que en ocasiones puede resultar obsesivo. Cada vez más adolescentes pasan por el quirófano, especialmente para hacerse liposucciones, rinoplastias e implantes de pecho. ¿ Qué hacer si mi hija quiere una cirugía estética?

Los adolescentes y el quirófano

El principal problema de que un adolescente quiera pasar por el quirófano es que no son lo suficientemente maduros -física y mentalmente- para someterse a una cirugía y entender los beneficios y riesgos de la misma. Muchos cirujanos optan por no hacer ninguna cirugía a menos que la persona sea mayor de edad, aún cuando tienen el consentimiento de los padres.

Mayor es el problema en el caso de las mujeres, ya que las adolescentes aún no están desarrolladas por completo, y en ocasiones no se puede ver el efecto final de un implante de pecho. Se han dado casos de chicas que quieren aumentarse el pecho, luego su propio pecho termina por desarrollarse -en forma y tamaño- y los implantes quedan mal o exagerados.

Hay pocas ocasiones en que es verdaderamente necesario que tu hija se opere. Operaciones como la rinoplastia -en la nariz- y la otoplastia -en las orejas- es necesaria para que desarrollen una mejor autoestima. Sin embargo, se pide que esperen hasta los 15 o 16 años para hacérsela.

También es cierto que muchas veces se debe tener cuidado con el tema de la autoestima, ya que una bonita imagen no siempre sacará los traumas, y en muchas ocasiones se debe construir la autoestima basada en otros valores que no sean la belleza. Esto es algo difícil en un momento en que la sociedad muestra cada vez más una imagen de las mujeres externa y frívola, y por qué no, machista.

Los niños y adolescentes son muy susceptibles a los mensajes que reciben a través de los medios de comunicación, por eso es importante que los padres comiencen desde antes con conversaciones que mejoren su autoestima.

El principal problema es que hoy en día se considera que la belleza es poder. Lo importante es que los padres brinden un mensaje de que el poder reside en muchas cosas que no solo van por la apariencia física. Un corazón abierto, gratitud, compasión, responsabilidad, perdón, confianza, el servicio o el compromiso son cualidades en las que reside el poder de una persona.

Sin duda alguna, es muy difícil decidir qué hacer si nuestra hija quiere una cirugía estética. Es un tema difícil y complicado, por lo que me gustaría saber qué piensas tú: ¿dejarías que tu hija adolescente se sometiera a una cirugía estética?