¿Qué hacer cuando tu hijo o hija es un buller?

Nadie es perfecto, esto incluye a los hijos y a los padres, por lo tanto si has recibido quejas de parte de maestros de la escuela o de padres de compañeros de tu hijo informándote que es un acosador, descubre en este artículo qué hacer cuando tu hijo o hija es un buller.

Escucha atentamente las quejas

Definitivamente te darás cuenta de que tu hijo es un buller si primero los maestros o padres de familia de la víctima te lo hacen saber; no es agradable pero es lo mejor que te puede pasar para que puedas ayudarlo a desenvolverse junto a los demás de la manera correcta. Recuerda no buscar culpables y no justificar el mal comportamiento de nadie.

Puede ser que los padres de la víctima estén muy enojados, invítalos cortésmente a calmarse y a dialogar cuando ambos estén serenos. Escucha atentamente todas las versiones y agradece la delicadeza de hacerte saber del problema, pide disculpas por los daños y promete que hablarás con tu hijo para resolver el problema, manténganse informados para ver cómo continúa la situación.

Escucha a tu hijo y haz que tome responsabilidad de sus actos

Carrie Paul, un ex consejero en una escuela primaria de Nueva York, insiste en que los padres deben comunicarse mejor con sus hijos y encontrar qué es lo que provoca la ira de sus hijos, quizá una situación determinada o problemas de control de sus impulsos.

Es necesario que promuevas la empatía en tus hijos, jugando roles diferentes, por ejemplo pregunta a tu hijo cómo se sentiría si alguien lo tratara como él trata a su compañero, de esta manera se hará más responsable y tendrá más conciencia del resultado de su comportamiento.

Previene dando el ejemplo

Es muy difícil como padres controlar todos los factores que rodean a los  hijos y que pueden desatar en él la ira y conductas que involucren el abuso del poder, pero en tus manos tienes una excelente fuente de solución de problemas: la familia.

Tú puedes garantizar la seguridad y el aprendizaje de conductas adecuadas dentro del lugar en el que eres el protagonista: tu propia familia. Fomenta un hogar respetuoso, donde los hijos no ven a sus padres agrediéndose física, verbal o psicológicamente. Ten muy en cuenta que los niños imitan lo que ven de los adultos, si ven en sus padres personas agresivas muy probablemente ellos lo serán también.

Ahora que sabes qué hacer cuando tu hijo o hija es un buller ayúdalo a superar esta conducta,  recuerda que los niños están en formación y frecuentemente imitan a los adultos, por esto necesitan de su familia, del amor, ejemplo y guía para ser mejores, es una lucha constante, segundo a segundo  pero que vale la pena.