5 cosas que nunca más volverás a decir después de tener tu primer hijo (o tal vez sí...)

Si tienes hijos, seguramente ya no puedes decir estas cosas...

Tener tu primer hijo es una de las experiencias que más cambia tu vida, en más de un sentido. Y aunque estoy segura que ninguna de nosotras cambiaría a su hijo por nada en el mundo, tenemos que ser sinceras y recordar que ser mamá también tiene sus desafíos como por ejemplo, estas cosas que probablemente nunca volveremos a decir después de tener a nuestro primer hijo.

1. “¡Qué suerte que hoy es viernes!”

Mientras que cuando no tienes hijos el viernes significa que empieza el fin de semana y por fin puedes descansar, los fines de semana después de tener hijos son completamente diferentes. 

Probablemente tendrás que cambiar las comedias románticas y los thrillers por películas animadas, y el domingo pasará de ser el día de holgazanear a ser el día en que preparas todo para que tu hijo sobreviva otra semana mientras tú trabajas.

2. “Me encantan los días de lluvia”

Si eres una mamá que trabaja, odiarás los días de lluvia porque significa tener que exponer a tu pequeño a las inclemencias de tiempo para llevarlo al colegio o a la casa de la abuela.

Y si eres una mamá que está en casa, ¡tener al niño todo el día encerrado puede llegar a enloquecerte!

3. “Me gustaría resfriarme para pasar una semana en cama”

Confiésalo: seguro que alguna vez deseaste estar resfriada para poder pasar unos días en cama, y que tu mamá o tu pareja te lleven sopa caliente mientras tu cuerpo y tu alma descansan.

¡Pero cuando eres mamá no puedes darte el lujo de estar en cama casi ni un solo día!

4. “Este verano voy a pasar mis vacaciones parrandeando”

Irte de mochilera con amigas, salir a bailar hasta el amanecer durante tres días seguidos, y beber hasta caer ya no son opciones cuando eres mamá, porque sabes que no puedes (y probablemente tampoco quieres) alejarte mucho de tu niño. 

Además, tienes que estar sobria y en buen estado físico para hacerte cargo del pequeño.

5. “No tengo ninguna razón para vivir”

Por supuesto, la maternidad también tiene su lado hermoso y brillante, y que compensa todos los sacrificios que puedas tener que hacer. 

Tu hijo se convierte en la fuerza y la razón más poderosa para vivir, para levantarte y salir adelante cada día sin importar lo que la vida nos ponga delante.

Cuéntanos, ¿qué otras cosas nunca más volviste a decir después de tener tu primer hijo? ¡Y ahora inspírate con estas 7 lecciones de maternidad que el primer hijo nos enseña!