La historia de Daniela es una de esas que nos da esperanza. Esas que demuestran que la gente solidaria abunda y que nadie mejor que nosotros para ayudarnos a sortear las dificultades.
Todos podemos ser solidarios: la inspiradora historia de Daniela

Daniela Tavarozzi, vive en el barrio de Luchetti, tiene 12 hijos y forma parte desde hace más de 7 años de la ONG Manos en Acción.
Su primer acercamiento a Manos en Acción fue para recibir ayuda, iba con sus hijos para comer y aprender: asistían al merendero y a diversos talleres, como los de tejido, costura, informática e inglés.
Un cambio de roles
En los últimos dos años, cuando la ONG creció, Daniela siguió participando activamente, pero ahora como voluntaria.
Hoy trabaja de costurera, confeccionando ropa para las personas del barrio, pero sus ganas de ayudar la hicieron estar siempre presente en la organización. En Manos en Acción encontró un espacio de pertenencia donde desplegar todo su potencial.
Yo soy voluntaria por mis hijos que vienen conmigo y por todos los chicos del barrio. Yo quiero ayudar a todos, no solo a los míos.
Actualmente, a la ONG del barrio de Luchetti donde está presente Daniela, asisten 125 chicos y ella ayuda en el merendero y es la encargada de brindar talleres de reciclado y manualidades con materiales descartables.
Además desarrolló un rol de liderazgo que le permitió quedar a cargo y ser referente para las distintas actividades que se llevan adelante en la organización, como la colonia de vacaciones de verano y las salidas.
Gracias a la oportunidad de ayudar a otros, hoy Daniela es una de las referentes del barrio y descubrió aspectos maravillosos de su persona. Una mujer comprometida que luchó por transformar su realidad de forma favorable para el beneficio de ella, de sus hijos y de muchos chicos del barrio.




