Los colores de tu casa pueden estimularte o relajarte: utilízalos a tu favor
Un buen descanso no sólo depende de la cantidad de horas de las que disponemos, sino también del entorno en el que lo podamos llevar a cabo.
Para generar un buen clima que vaya a tono con nuestras sensaciones y nos ayude a relajarnos, es importante que nuestro hogar (principalmente la habitación en la que dormimos), esté pintado con los colores adecuados.
Los colores pueden ser de dos tipos: cálidos y fríos.
Cálidos, son colores que estimulan, y dan sensación de cercanía. Los fríos generan efecto de distanciamiento, dan la sensación de relax, reposo y calma.
Conocer las sensaciones que pueden aportarnos los diferentes colores, va a hacer que a la hora de pintar nuestra casa podamos elegir el efecto que queremos transmitir.
Entonces para que puedas relajarte totalmente en tu casa, y logres plasmar la sensación que tú quieras, vamos a describir hoy los beneficios que ofrecen tres colores:
Comenzamos por el blanco roto. Es un blanco distinto porque no tiene la frialdad que caracteriza al blanco, por esa razón transmite frescura y confort. Permite descansar la vista y amplía la luz natural.
El beige, es un color que suele dar calidez, y también da un toque natural y relajante.
Amarillo, es un color estimulante, aporta energía y calor. Da vitalidad, y transmite confianza, optimismo, y alegría. Perfecto para ambientes jóvenes.
Ahora ya sabes que cuando pintas no solo estás cambiando el color de las paredes, sino que estás dando sensaciones, así que elige qué es lo que quieres transmitir y búscalo en la paleta de colores.
Vía | decoesfera