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¿Lo habías pensado? Tienes estos 7 motivos para mudarte a una gran ciudad

A todos nos llega en la vida ese típico momento en el que sientes que estás estancado: tu carrera profesional no avanza, tampoco tu relación de pareja, ni todos esos otros sueños que te habías propuesto cumplir.

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A tu alrededor todo sigue igual y en ocasiones te preguntas cómo sería plantar el huevo en otro lugar. Sí, estás necesitando leer estos 7 motivos para mudarte a una gran ciudad

1. Expectativas laborales

Si vives en un pueblo o una ciudad pequeña, posiblemente te hayas percatado de las limitaciones laborales que estas ofrecen, especialmente si eres un artista o has cursado estudios como traducción o turismo, los cuales siempre requieren de una mayor movilidad.

Mudarte a una nueva ciudad implica estar abierto a un mayor abanico de posibilidades y oportunidades laborales

Imagen Shutterstock

2. El poder del anonimato

El anonimato está algo infravalorado, en mi opinión. Y es que poder pasear por una ciudad en la que nadie te conoce o vestir como quieras, son pequeños gestos que confirman nuestra identidad y nos acercan a la versión de nosotros mismos que siempre imaginamos. Te permite explorar una parte tuya desconocida, más liberada, sometida a menos prejuicios. 

3. Mayor perspectiva

El anonimato y la vida que surge de ese nuevo tú te permite, al igual que los viajes, tener una mayor perspectiva de la vida que dejaste atrás, lo cual conlleva valorar mejor a tus seres queridos, analizar tu trayectoria y saber el rumbo que quieres tomar a partir de este nuevo cambio. 

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4. Una mala ruptura

Cuando alguien decide mudarse tras una ruptura, lo normal es pensar que trata de huir y posiblemente sea así, pero este no tiene por qué ser malo. Tomar oxígeno tras un episodio dramático como una ruptura o la muerte de un ser querido, es incluso necesario a la hora de tomar impulso y encontrar en esa nueva vida un refugio que te permita avanzar, distraerte y apostar por nuevas oportunidades. 

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5. Ocio 2.0

En tu pueblo siempre vas a los mismos sitios: el bar de un conocido, un cine antiguo al que las películas llegan tres meses después de su estreno o una bolera que supone el mismo plan de cada fin de semana.

Las grandes ciudades despliegan un sinfín de opciones de ocio y entretenimiento que reinventan las formas de divertirse, desde cabarets hasta galerías de arte, de mercados donde sirven bocados deliciosos a musicales de primer nivel. 

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6. Amigos diferentes

En las grandes ciudades se aglutinan personas de todos los tipos: bohemios, aventureros, fiesteros, artistas... un plantel de nuevos contactos que te permite abrir tu mente, disfrutar de un modo diferente y hasta conocer a esa media naranja que se te resistía. 

7. Independencia

Si seguimos viviendo en nuestro pueblo de toda la vida, ser independiente es igualmente factible, salvo por el hecho de conocer a todo el mundo, tener a los papis cerca e incluso ser carne de chismorreo en alguna otra ocasión.

En una gran ciudad, el hecho de ser una hormiga más entre tantas personas supone pasar más desapercibido sin que por ello tengas que renunciar a encontrar nuevos amigos o conocerte tu barrio al dedillo. 

Estos 7 motivos para mudarte a una gran ciudad te convencerán a la hora de tomar esa decisión que durante tanto tiempo atrasaste. O, al menos, para intentarlo. Volver siempre puedes. ¿Te gustaría mudarte a otro lugar?

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