La erradicación de las alergias mediante la medicina natural
Conceptualmente, una alergia es una respuesta inapropiada de nuestro sistema inmune, ante un agente que normalmente no nos hace daño, tomándolo como un agente nocivo y revolucionándose para eliminarlo.
Nuestro sistema inmunológico actúa mediante el uso de los glóbulos blancos sanguíneos para eliminar al agente nocivo. Pero en el caso de las alergias, el sistema inmune actúa erróneamente “malinterpretando” al agente pasivo, y volviéndose el mismo funcionamiento del sistema inmune una enfermedad.
Las reacciones alérgicas son producidas por diversos elementos. El polvo o el polen suelen ser causantes comunes de las mismas. Asimismo, elementos como los cosméticos, aditivos a las comidas, el pelo de animales y algunos alimentos también producen reacciones alérgicas. En otramedicina plantearemos cómo disipar las reacciones alérgicas mediante dos elementos de la medicina natural: la aromaterapia y la hidroterapia.
Las esencias son muy recomendadas para disipar la alergia. Sin embargo, algunas esencias pueden contribuir a intensificar la alergia, en lugar de disminuirla, por lo cual se recomienda que se comience de a poco a aplicarlas. Los aceites de eucalipto, basil, pepermint y pino son muy útiles en el caso de congestiones. Se pueden inhalar directamente, o esparcirlo por el aire como perfume. Pero siempre comenzando de a poco, puesto que la manera de nuestro organismo de asimilarlas depende de cada persona.
Los baños relajantes también ayudan a combatir los efectos alérgicos. Un buen baño de tina preparado con tres gotas de lavanda y tres gotas de manzanilla relajará nuestro cuerpo y esto contribuirá a que la alergia llegue a su fin. Si la alergia consiste solamente en un resfriado, tome un baño con dos gotas de aceite de rosemary, dos de aceite de toronjas y dos de aceite de juniper.
Pero si la alergia es muy grave, recuerde que deberá consultar a un médico de inmediato, puesto que si se desarrolla muy rápidamente más de lo debido las consecuencias pueden ser muy lamentables.
Vía | Nuestra medicina