Lifestyle

Claves para que correr te ayude a bajar de peso

Si quieres empezar bien el año y eliminar esos kilitos de más, acuérdate que sí es importante la alimentación, pero si no haces ejercicio, no tendrás los mismos resultados. Solo necesitas unos tenis y listo, ¡a correr!

Imagen Thinkstock

¿Cuánto tiempo correr?

PUBLICIDAD

Cuando empiezas una sesión de ejercicio, el cuerpo tarda aproximadamente 20 minutos en empezar a ‘’quemar” grasas, por lo que te recomiendo que hagas al menos 45 minutos de actividad, cinco días a la semana. Si logras hacer una hora, por supuesto que será mucho mejor.

¿Rápido o lento?

A muchas mujeres no les gusta correr porque sienten que es muy cansado, pero no tienes que ganarle a nadie. Un programa adecuado de entrenamiento te puede ayudar, lo mejor es combinar ritmos e intensidades.

Empieza poco a poco. Para que la grasa se oxide, tu cuerpo necesita oxígeno, ¿cómo lo podemos medir? Si puedes ir hablando es porque tienes oxígeno: estás quemando grasa. Por eso el ejercicio hay que hacerlo a un paso que sí estés trabajando, pero que lo sientas cómodo, es decir, que logres completar fácilmente 45-60 minutos. 

Si solo aguantas así caminando o trotando, no te preocupes, te servirá para bajar de peso y cada vez podrás ir un poco más rápido sin agitarte tanto.

Te recomendamos: Cómo prevenir el sobreentrenamiento

Imagen Thinkstock

Incluye dos días a la semana de cambios de ritmo. Este tipo de entrenamiento te da más velocidad y también te sirve para bajar de peso. Calienta 10 minutos a un paso suave y después durante 30-40 minutos realiza intervalos: 2 minutos a un paso rápido X 2 minutos trotando. Ojo, el paso rápido no es a tu máxima velocidad, pues en la recuperación no debes detenerte por completo.

Termina con otros 10 minutos de enfriamiento para que tus músculos se recuperen.

Y por si buscas un nuevo propósito: 10 cosas que no sabías sobre ser mujer y correr un maratón

PUBLICIDAD

La clave del éxito, la alimentación

Imagen Thinkstock

No por correr puedes comer todo lo que quieras. Debe haber un balance entre las calorías que gastas con las que consumes. Ten en cuenta tu objetivo para que valga la pena el esfuerzo que estás haciendo.

Hidratos de carbono, sólo los suficientes. Acostumbra a tu cuerpo a que, antes y después de correr, es cuando recibe más carbohidratos, pues son tu gasolina principal para el ejercicio, y así no se te antojarán a lo largo del día.

No corras en ayunas. Recuerda que necesitas combustible para dos cosas: en primera, para que aguantes la sesión de entrenamiento y, en segunda, para que el metabolismo te favorezca. Un plátano con un puño de nueces o una barra de amaranto es una buena opción para antes de correr.  

Come frecuentemente. No debes pasar más de cuatro horas sin alimento. Es un mito que si no cenas o no desayunas bajarás más rápido, ¡es todo lo contrario! Si tu dieta es muy baja en calorías, acostumbras a tu cuerpo a pasar hambre y almacena grasa como precaución.

Además de las tres comidas principales del día, consume al menos dos snacks, uno a media mañana y otro a media tarde.

Ahora ya lo sabes, aunque la dieta y el ejercicio pueden ser efectivos por sí mismos para bajar de peso, una combinación de ambos es mucho mejor. ¡Ponte a correr, y elimina esos kilitos! 

También te recomendamos: 5 consejos para corredoras primerizas

Relacionados: