¿Qué debo hacer hoy por mi bien? Era la pregunta que se hacía Benjamin Franklin cada mañana. Albert Einstein, por su parte, siempre repetía: ''Aprende de ayer, vive por hoy y mantén la esperanza para mañana, lo importante es nunca dejar de reflexionar''.
6 preguntas que debes hacerte a diario si deseas mejorar tu vida para siempre


Muchos pensadores y filósofos a lo largo de la historia han insistido en la importancia que tiene cuestionar los diferentes aspectos de nuestras vidas. Por supuesto que incorporar este hábito crítico puede ser desafiante, y más en tiempos como estos en los que constantemente recibimos mensajes sobre cómo debemos ser y qué gustos debemos tener; absolutamente todo está predispuesto y facilitado para que no necesitemos (o podamos) pensar.
Pero enfrentar aquellos aspectos de la vida que más te cuestan puede ser muy efectivo y puede ayudarte a obtener esa dosis de confianza en ti mismo que necesitas para vivir mejor.
Si deseas adquirir esta costumbre y automatizarla en tu vida, puedes comenzar haciéndote estas preguntas a ti mismo todos los días...
Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿me gustaría vivirlo como lo estoy viviendo?

En su famoso discurso en la Universidad de Stanford, el entonces CEO de Apple, Steve Jobs, contó que cada mañana durante 33 años incorporó ese hábito a su rutina. Se miraba en el espejo y se preguntaba: ''Si hoy fuese el último día de tu vida, ¿te gustaría estar haciendo esto?''.
Si la respuesta era no durante muchos días seguidos era una señal de que había algo que necesitaba cambiar. Recordar que se iba a morir algún día era para él la forma más efectiva de trabajar en lo más importante y satisfactorio, porque se daba cuenta de que no tenía nada para perder.
¿Cómo me veo a mí mismo?

Cambiar la forma en que nos vemos a nosotros mismos puede influir positivamente en cómo actuamos en determinadas situaciones. La perspectiva que uno tiene de sí mismo puede ser muy diferente. Por ejemplo: un joven puede verse como un estudiante sin experiencia a la hora de obtener un trabajo o puede verse como un estudiante avanzado con hambre de crecer profesionalmente y que se esforzará al máximo para obtener un trabajo.
Sin lugar a dudas cómo nos definimos también define como otros nos ven y la confianza que depositarán en nosotros.
¿Cómo estás?

Esta pregunta se la hacemos a cada persona que saludamos a diario, pero ¿alguna vez nos la hacemos a nosotros mismos? Pocas veces nos preocupamos por cómo nos sentimos verdaderamente, a veces resulta más simple ignorar todo lo que nuestro inconsciente nos quiere decir, pero al fin y al cabo eso será peor.
Una vez que reconocemos que no estamos del todo bien, ya estamos a mitad de camino de poder cambiar nuestra situación.
¿Qué pasó hoy de positivo?

Si uno dedica solo 15 minutos al final del día para reflexionar y observar todo lo bueno que sucedió en la jornada, se sentirá mucho mejor y satisfecho. A veces cuando algo malo pasa en nuestro día tiende a opacar todo aquello bueno que pasó. Pero si vemos de forma más objetiva, nos sentiremos mejor y estaremos más estimulados para trabajar.
¿Vale la pena el dinero?

La sociedad del consumo en la que estamos inmersos hoy nos transmite que nuestro objetivo principal debe ser trabajar para obtener mucho dinero y así poder disfrutar de todos los lujos que se nos ofrecen. De todas maneras, la ilusión de que el dinero resuelve de inmediato todos los problemas es falsa. Si no eres feliz ahora, es probable que cuando tengas dinero tampoco lo seas.
Una vez que te liberes de esa presión por tener más y más dinero te sentirás mucho mejor y trabajarás de otro modo.
¿Cuál es mi mejor talento?

Para encontrar el trabajo de tus sueños es necesario que empieces conociendo en qué eres bueno y definas qué es lo que realmente te apasiona.
No todos tienen clara su vocación desde pequeños, sino que algunos necesitan más introspección. Más allá de esta diferencia puedo garantizarte que todos tenemos una actividad en la que podemos destacarnos.
¿Por qué tanta seriedad?

No significa que no tengamos que ponerle seriedad a todo lo que hacemos. Pero a veces cuando estamos muy estresados, la mejor solución es decirnos a nosotros mismos que la vida no es tan seria como a veces la concebimos. Sí necesitamos trabajar duro, sí tenemos que esforzarnos para llegar lejos, pero nunca podemos perder de vista que lo que más importa es nuestra felicidad y bienestar.
Como ves, estas preguntas son muy simples pero pocas veces las tenemos en cuenta. Cada una de ellas puede ayudarte a mejorar diferentes rincones de tu personalidad y así hacerte sentir mucho mejor contigo mismo. También vivirás con la tranquilidad de que viviste una vida libre de arrepentimientos y repleta de buenas aventuras.









