Polémica con el alisado brasileño

Nunca nuestros cabellos rizados habían generado tanta polémica. Brasil Blowout, la compañía pionera que produce una línea de productos desarrollados para el alisado del cabello rizado está bajo ataque, pues ahora es el Congreso de los Estados Unidos quien le exige a la FDA que mande a retirar de mercado todos los productos Brasil Blowout. Diez miembros del Congreso enviaron una carta a esa agencia (Food and Drugs Administration) porque al parecer los productos de Brasil Blowout tienen altos niveles de formol.

Por su parte Blowout Brasil siempre ha mantenido que sus productos son seguros y libres de formol, a pesar de los resultados de una prueba que cayó en poder de los congresistas y que según ellos demuestra que estos productos tiene un 8% de formol.  Sólo se consideran seguros para la salud los que contengan un 1%.  Mike Brady, el director general  de la marca dijo al Wall Street Journal que Brazilian Blowout es un producto totalmente seguro que genera empleos en el área de la peluquería y genera dinero para la economía.

Mientras tanto la FDA dijo que "Todavía estamos evaluando los datos sobre estos alisadores."

En las peluquerías corren los rumores y se acrecienta la inquietud mientras se espera una decisión sobre esto. Se ha incrementado la afluencia de mujeres que quieren hacer el tratamiento antes de que lo prohíban... Es curioso pero a veces la vanidad femenina puede tomar matices irracionales.

Les cuento que soy propietaria de una abundante cabellera rizada y, como la mayoría de las mujeres de cabello rizado, yo hubiera preferido tenerlo liso. Por mucho años estuve resignada a llevar mis rizos, porque tratar de mantener liso un pelo que es naturalmente rizado, exige mucho tiempo, esfuerzo y dinero.

Eso fue hasta mediados del 2008 en que decidí probar el alisado brasileño. En realidad, esta franquicia brasileña apareció en 2005 pero preferí esperar a ver cómo les resultaba a las demás mujeres primero. El éxito transnacional que tuvo este método de alisado finalmente me convenció; eso y el hecho de que el tratamiento me ha durado un año. Un año completo con mi pelo bien peinado y con buen aspecto. Levantarte en las mañanas, ducharte y estar lista y con un pelo perfecto en 15 minutos es algo que a cualquier mujer le gustaría. Era como si hubieras salido de la peluquería y no de tu casa.

Hasta el momento sólo lo he hecho dos veces: la primera vez en 2008 y la otra en 2010. Otra cosa que le dio mucho impulso a esto es que muchas famosas de Hollywood como Nicole Kidman (que es pelirroja pero con un pelo natural muy rizado) o Halle Berry, hablaron maravillas de estos alisados. No tuve efectos colaterales, ni me intoxiqué: todo lo contrario de las muchas historias y denuncias que han llevado a prohibir estos alisados en Canadá, Francia o hasta en su propio país de origen Brasil.

El formol es carcinógeno cuando se excede la cantidad autorizada, y muchas personas han experimentado problemas para respirar, tos y ojos hinchados. Una verdadera lástima debo decir, pero jamás hay que llegar a los extremos a los que han llegado algunas mujeres en Brasil donde, de noche y de manera clandestina, se siguen realizando estos alisados.

Con la salud no se juega y si efectivamente se comprueba que este alisado es dañino (tengo que admitir que sí lo es) tanto para la persona que recibe el tratamiento como para las personas que trabajan en la peluquería y que están manejando estos productos todos los días, seguro que quedarán prohibidos en todos los países.

Fue bueno mientras duró, así que:  ¡ Hola de nuevo, queridos rizos!