Unas pestañas largas y bonitas son una de las debilidades de las mujeres que amamos el mundo de la belleza. Tus pestañas puedes darte un look coqueto, atrevido o hasta ser la pieza central de tu maquillaje.
Descubrimos las pestañas de mink y este es el motivo por el que no queremos comprarlas
Por:Lilian Pérez
Es por esto que las compañías inventan una gran cantidad de mascaras y pestañas postizas, para cumplir todos nuestros sueños cosméticos (hasta los que ni sabíamos que teníamos).
Entre ellos se encuentran las pestañas de mink. Estos postizos tienen las ventajas de ser más suaves, ligeras, flexibles y duraderas. Un par se puede usar hasta 20 veces, y las extensiones te pueden durar hasta un mes o mes y medio si las cuidas lo suficiente.
Otro de los pros que ha convertido a las pestañas de mink en una tendencia es que se ven más naturales que las sintéticas. Pero justo este punto es el que nos lleva al gran contra que tienen: se ven naturales porque son de pelo natural, de visón, para ser exactos.
Así como los abrigos de mink, estas pestañas son fabricadas con el pelo de visón, unos pequeños animales de la familia de las comadrejas.
Te invitamos a leer: 5 cosas que usas todos los días y que no sabías que están hechas de animales
Varias compañías aseguran que sus pestañas están libres de crueldad animal. Que el pelaje lo consiguen cuando se le cae de manera natural al visón cuando lo cepillan. Pero, ¿eso no te suena un poco extraño? ¿Cuándo se ha escuchado que algo que venga de la piel de un animal sea cruelty-free?
Los visones son animales salvajes, por lo que para tener acceso a ellos se necesitaría mantenerlos cautivos. En otras palabras, tenerlos en granjas de piel. Y ese es un trato que ningún ser vivo merece.
No te dejes engañar. Si alguien quiere convencerte de que las postizas o extensiones de mink (tanto de cabello como de pestañas) se fabrican sin maltratar visones, estás en todo tu derecho de dudar de su sinceridad.
Mandy Carter, activista de los derechos animales y redactora en The Dodo comentó en un artículo que nunca ha obtenido respuestas claras y concisas de compañías de pestañas de mink acerca de su proceso de manufactura.
Se dice que la belleza duele, y puede ser cierto en algunos casos, depende de cómo lo veas. Pero no hay ninguna razón para que los animales deban sufrir por nuestros intereses estéticos.
(Nota: Mientras buscaba fotografías de "minks" o visones en Instagram, me llamó mucho la atención que encuentras una del animal como por cada 40 de pestañas y abrigos).