Cómo pintar un mural

Los murales son unas de las maneras de decorar nuestro hogar. Se están conviertiendo en una de las tendencias más fuertes dentro de la decoración actual. ¿Te gustaría que tus paredes luzcan de una manera realmente personal? ¿No quieres desembolsar una gran cantidad de dinero en pintores? Continua leyendo y descubrirás cómo pintar un mural tú mismo.

Necesitamos clacas amarillos, pinturas, lápiz para repasar los trazos, cinta de carrocero y pinceles de buena calidad. En primer lugar pasa la imagen a blanco y negro. Luego, por algún programa informático, debes dejar la imagen al tamaño deseado (para abrir la imagen haz click aquí). Imprime la imagen en formato Din A4 (que es el que suelen utilizar las impresoras en casa).

Cuando ya lo tengas impreso pegalo y haz un poster gigante con la imagen. Colocalo en la pared. Luego tendrás que calcarlo poco a poco. Es importante que el calca sea amarillo para ensuciar la pared. Una vez que tengamos calcado el dibujo repasaremos unas líneas hasta asegurarnos de que coincida perfectamente con el original. Luego comenzaremos a rellenar el dibujo con pinceles de distintos grosores.

A la hora de pintar ten a mano un vaso de agua y una servilleta para evitar que la pintura chorree. Por último pinta los labios de fucsia y haz el marco del mural con cinta de carrocero. ¡Está pronto!