Tratamientos Faciales
Nuevas (y mejoradas) rutinas de grooming
Eres hombre y no te gusta hablar de esto, lo sabemos. Olvídate de todo y sigue esta rutina, hecha especialmente para ti.

Asociamos, aún a estas alturas, la preocupación por la belleza con las mujeres. Los hombres ni siquiera quieren hablar del tema. Por eso, a ti, caballero que estás leyendo esto, te presentamos una rutina especialmente diseñada para ti. Es para la piel masculina, que es más gruesa, áspera y grasa. Sigue estos pasos para tener un cutis más balanceado.
iStock
Limpieza. El jabón y el agua no son suficientes; tu piel necesita un cuidado más elaborado. Comienza y finaliza el día con una crema limpiadora o un jabón facial para eliminar los residuos en los poros y evitar manchas. No uses jabón corporal, pues reseca el cutis y lo irrita. Aplica el limpiador con agua fría o tibia, porque el agua calienta tiende a resecar la piel.
Cortesía
Cuando apliques el exfoliante, hazlo en movimientos circulares, ya sea con la mano, o con un cepillo facial.
Cortesía
Es indispensable aplicar un exfoliante al menos dos veces a la semana. Esto es para eliminar células muertas, puntos negros y espinillas. En barba y cuello se tienden a incrustar los vellos, causando granos, así que dale una extra pasada a esa área. La exfoliación deja la piel más brillante, y ayuda a prepararla para el afeitado, ya que suaviza los vellos y evita la irritación.
Cortesía
Es indispensable una buena maquinilla de afeitar. Si usas desechables, asegúrate que tenga hojas dobles. Si prefieres usar navaja, hazlo con cuidado para evitar heridas. Aplica crema de rasurar mientras tu cara esté húmeda; esto la lubricará. Al terminar, enjuágate con agua fría. Sécate con toques suaves, y no frotes. Aplica un after-shave para aliviar la irritación.
Cortesía
Para recuperar y equilibrar el pH de la piel, es necesario aplicar un tónico. Éste se debe aplicar por medio de un algodón sobre toda la piel limpia y esperar a que se seque al 100% para pasar al siguiente paso.
Cortesía
No debe de pasar un día sin que humectes tu piel para mantenerla elástica y evitar futuras líneas de expresión. Elige la crema de acuerdo a tu piel: si es reseca, lo ideal es un humectante que contenga ingredientes como aceite de argán, manteca de karité o aceite de oliva. Si es grasosa, elige un humectante en gel, ya que son más ligeros.
Cortesía
¿Sabías que la piel alrededor de los ojos es 10 veces más delgada que la del resto de la cara? Por eso es más propensa a hundirse con el paso del tiempo. Si aplicas un tratamiento, inmediatamente lucirás —y te sentirás— más fresco. Si aún no existe este paso en tu rutina, más vale tarde que nunca.
Cortesía
No tienes que estar en la playa para aplicar un protector solar: todos los días estamos expuestos al sol y a sus estragos. Para matar dos pájaros de un tiro, aplica un humectante que contenga SPF. Usa lentes para proteger el área del contorno de los ojos.
Cortesía