La actriz y actual diputada mexicana Carmen Salinas es una de las figuras más polémicas de la farándula dado su papel habitual de opinadora sobre las vidas de los artistas, pero su propia trayectoria está marcada por una serie de dramas personales que ninguna madre querría sufrir.
Las tragedias de sus hijos han marcado la vida de la polémica Carmen Salinas
La actriz ha tenido varias pérdidas familiares por cáncer entre ellas su hijo Pedro Plascencia, además vio cómo fallecía uno de sus bebés en sus manos.

Salinas se casó en 1956 a los 16 años de edad con el músico mexicano Pedro Plascencia Ramírez, con quien tuvo dos hijos, pero también sufrió cinco abortos cuando ya llevaba embarazos con más de tres meses de gestación. "Yo lloraba mucho", reconoció en una entrevista de televisión en 2011 con Estrella TV.
Uno de los momentos más trágicos en la vida de esta mujer de 83 años fue la pérdida de uno de sus bebés en sus brazos.
“Se me murió mi bebé sietemesino, aquí lo tenía en mis manos vivo, en mi casa. Yo le corté el cordón umbilical y decía 'tráeme botellas de agua caliente', pero lo que yo no sabía era que tenía que sacarle las flemas y yo lo vi morir, a mi bebé”, explicó en Telemundo en junio de este año.
Una pérdida que la ahora diputada del PRI (Partido Revolucionario Institucional) no supera y que recuerda como si hubiera sido ayer: “Cuando llegó Pedro (su esposo en ese momento) y me vio cargando a mi bebito muerto me lo quitó de las manos, lo velamos y al día siguiente lo sepultó en el panteón de Dolores” en la Ciudad de México, añadió la política.
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Salinas, que sólo tiene la educación primaria, tuvo otro duro golpe cuando le avisaron de que su hijo mayor tenía cáncer terminal:
“Recuerdo bien que fue un martes del 93 cuando escuche esas horribles palabras del doctor: 'Le tengo malas noticias, Pedrito tiene cáncer en los pulmones'”, recordó en palabras al periódico El Universal. Su hijo enfermo murió a los 37 años en 1994.
La muerte de su 'Pedrito', supuso un antes y un después en su vida: “Al morir él ya no pude hacer las imitaciones (ella era comediante). Las enterré junto con él. Empezaba a hacer una imitación y se me hacía un nudo en la garganta, ya no me salía la voz y empezaba a llorar. ¡Ya no quise hacerlas!”, confesó a La Jornada.
El cáncer ha sido una constante en la vida de Carmen, ya que afectó a su hermana, su exesposo el pianista Pedro Plascencia Ramírez, su hijo Pedro Plascencia jr, así como su mejor amigo y asistente Juan ‘El Chato’ Cejudo.






