Desde hace mucho tiempo han circulado rumores negativos por las salidas abruptas de connotados creativos en DC Comics por razones que solo quedan a la especulación. Muchos sitios web se atreven a formular teorías, muchas de ellas con mucho sentido y que explican lo difícil que es para DC mantener feliz y retener al talento. He aquí 5 ejemplos en que la relación creativo-DC Comics terminó en tragedia.
5 escritores que se fueron muy enojados de DC Comics

1. Mark Waid

En el caso del gran escritor norteamericano su odio por DC Comics no es especulación, sino que se ha encargado de despotricar contra la editorial en varias entrevistas. Su molestia tiene nombre y apellido: Dan DiDio, el mandamás de la editorial. Numerosos encontrones entre ambos en las oficinas de DC se supieron por toda la industria, y Waid declaró en repetidas ocasiones que DiDio hablaba pestes de la serie 52, que Waid escribía junto a Greg Rucka, Geoff Johns y Grant Morrison y que fue un éxito absoluto. Tras concluir 52 Waid abandonó DC por un puesto en Boom! Studios y actualmente escribe Avengers en Marvel.
2. James Robinson

Este tremendo escritor reconocido por su trabajo en JSA y Starman recibió su propia Tierra en los New 52. Sería el encargado de crear la Tierra 2, la cual era habitada por héroes como Alan Scott y Jay Garrick. El éxito fue rotundo y todos adoramos su serie. Por las altas ventas se empezaron a correr rumores de que se le daría una serie paralela a Robinson, también situada en la Tierra 2. Las malas lenguas dicen que DC le ofreció la serie a otro escritor, y molesto por la falta de lealtad decidió salir inmediatamente de la serie, dejando líneas argumentales inconclusas a cargo del gran Tom Taylor. Actualmente escribe Squadron Supreme para Marvel.
3. Joshua Hale Fialkov

El término de la legendaria serie de Green Lantern a cargo de Geoff Johns trajo varios cambios en las series de la franquicia, que en ese momento eran cuatro y estaban mayormente dirigidas por lo que Johns hacía en la serie principal. Peter Milligan había hecho un trabajo espectacular en la serie Red Lanterns y el joven escritor Joshua H. Fialkov quedaría a cargo tras el término del último arco. Se supo por diversas fuentes que los editores no aceptaron casi ninguna de las propuestas creativas de Fialkov, por lo que se salió del proyecto incluso antes de lanzar el número 1. Por suerte la serie quedó a cargo del tremendo Charles Soule, uno de los escritores de ascenso más meteórico de los últimos años.
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4. Cullen Bunn

La historia de Cullen Bunn en DC es compleja. Comenzó con una excelente serie con Sinestro como anti-héroe y protagonista. DC vio potencial y le dio más series, y fue ahí donde todo se empezó a complicar. Primero le dieron el relanzamiento de Lobo, el cual venía con un re-diseño que el público odió desde un comienzo (e incluso antes del lanzamiento de la serie) por ser poco fiel al personaje oficial. En varias ocasiones Bunn declaró lo incómodo que era trabajar con críticas y odio desmedido que ni siquiera se basaban en su trabajo. Luego recibió Aquaman tras la salida de Jeff Parker, quien fue bien recibido por los fans. Todo estuvo bien hasta que en su historia Aquaman resultó ser "violado" por la hermana gemela de Mera, lo cual desató la ira inconmensurable de la policía moral de internet. Decidió dar un paso al costado e irse a Marvel, en donde se le entregaron importantes series en la franquicia mutante.
5. J.H. Williams III

El arte de este talentoso dibujante es una de las mejores cosas que le han pasado a los cómics. Tras el lanzamiento de los New 52, el escritor W. Haden Blackman y Williams III quedaron a cargo de la serie Batwoman, que seguiría las aventuras de Kate Kane bajo el manto del murciélago. La serie era gloriosa y los fans estaban fascinados con el talento de ambos creadores. En un punto de la historia la protagonista decide casarse con su novia, la detective de GCPD Maggie Sawyer, pero la editorial no permitió el matrimonio por la política de "héroes casados son menos interesantes, necesitamos héroes solitarios y tristes". Esto molestó de sobremanera a ambos creadores y abandonaron súbitamente la serie sin siquiera completar el arco en desarrollo, el cual fue concretado de manera mediocre por Marc Andreyko, dejando un sabor amargo en los fans que seguimos la serie de forma religiosa.
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