Tranquilos todos: Schwarzenegger y Nickelback se reconciliaron tras su pelea en Twitter

La banda canadiense Nickelback es algo así como la Michael Bay del mundo del rock.

Odiada con fervor y efusividad por miles de aficionados a la música que la han convertido en un chiste recurrente y en la mala banda definitiva, y han opacado por completo cualquier expresión de simpatía o agrado hacia los creadores de “How You Remind Me”.

De modo que los silenciosos (o silenciados) fanáticos de Nickelback son algo así como una criatura mística e inasible, pero con efectos muy reales: la banda superó los 50 millones de discos vendidos, es una de las más exitosas de la historia de Canadá y, a pesar de estar inevitablemente asociada a los 90 y esa despectiva etiqueta de post-grunge, aún hoy sigue llenando estadios y vendiendo miles de álbumes.

• Un asunto de interés científico: Una investigación explica por qué todo el mundo odia a Nickelback

Todo eso no ha podido evitar los millones de chistes a expensas de Nickelback, uno de los pasatiempos favoritos de internet y del mundo, cosa que ha hecho desde Mark Zuckerberg, pasando por un departamento de policía canadiense que prometió castigar a los conductores borrachos haciéndolos escuchar el tercer disco de la banda, hasta opositores de Donald Trump que se presentaron en un acto de campaña con una pancarta que lo acusa de fan de Nickelback.

De modo que Arnold Schwarzenegger tampoco pudo evitar recurrir al chiste de la escasa simpatía que despierta la banda:

Arnold estaba criticando la práctica conocida como gerrymandering, una manipulación electoral que según ha denunciado ha sido utilizada por demócratas californianos en el congreso para mantener su poder.

En un video que compartió junto con su tweet, enumera cosas que “son más populares que el congreso”, como las hemorroides, las cucarachas, los tratamientos de conducto, las colonoscopias, el herpes y, por supuesto, Nickelback.

Pero la banda decidió responder al ex gobernador de California y ex Terminator, con un tweet bastante ingenioso y algo combativo:

Se refieren, obviamente, a la denostada película de Joel Schumacher en la que Schwarzenegger interpretó a Mr. Freeze.

En honor a este personaje, Schwarzenegger decidió enfriar la discusión y volvió a responder en forma más conciliadora, apelando a los famosos juegos de palabra que tan bien le salían a Mr. Freeze.

Entonces finalmente todo se dio por concluido con cordialidad por parte de la banda.

Tal vez todo esto pequeño conflicto deje una buena lección. 

Especialmente para Nickelback, que puede notar que enfrentando a los que se burlan de ellos pueden llegar a buen puerto, aunque para hacerlo con todos, que son muchos, deberán dedicar tiempo completo, y así abandonar cualquier otra actividad, especialmente la de grabar, tocar y componer. Ganamos todos.

• No están solos: Las 11 bandas más odiadas de los últimos 30 años