Morirás de nervios cuando veas las fotos que un padre le toma a su bebé en situaciones "peligrosas"

Las fotografías de bebés son adorables. Probablemente te ha pasado que si tienes un amigo u amiga que han sido padres recientemente, sus cuentas en redes sociales estén llenas de fotos del recién llegado, y a pesar de que a veces te parezca una exageración que le tomen 50 fotos del mismo momento en las que solo cambia la dirección de la mirada, no puedes negar que son tiernas. 

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Ahora bien, no siempre hay que hacer lo que hacen los demás, y este chico irlandés lo tiene bien claro. Es por eso que en su cuenta de Instagram se dedica a compartir fotos de su pequeña hija en situaciones "peligrosas" que divierten a todos. Pero lo más interesante es el motivo por el que lo hace, y te lo contamos. 

El lado positivo de las cosas

Stephen Crowley es diseñador y vive en Dublín. Además, tiene una adorable hija de 18 meses llamada Hannah, con la que no para de tomarse fotografías tiernas y sobre todo divertidas. Son el dúo perfecto a la hora de pasarla bien, y Stephen no tuvo mejor idea de pasar el tiempo con su hija que tomando fotos de ella y aplicándoles photoshop de manera que parezca que Hannah se mete todo el tiempo en situaciones peligrosas, como jugar con cuchillas, conducir un automóvil o jugar en las alturas. 

La mayoría de las reacciones de las personas a sus fotos han sido positivas, mientras que también hay quienes no entienden que es una broma y que realmente deben tomarlo como una diversión. Además, está claro que esas personas no conocen la historia que hay por detrás de Hannah y su papá. 

Esta pequeña al nacer fue diagnosticada con un trastorno inmunológico poco común llamado  linfohistiocitosis hemofagocítica (HLH), lo que provocó que pasara los primeros 6 meses internada en el hospital, desde los 4 a los 10 meses, período en el que se realizó un tratamiento con quimioterapia y, afortunadamente, en donde le hicieron un trasplante de médula que fue su salvación.

“Debido a que nos perdimos en tanto que hacer durante su primer año, tomamos un montón de fotos ahora que somos capaces de hacer cosas normales. Ella está mucho mejor ahora, y tiene un gran sentido del humor teniendo en cuenta lo que ha pasado hasta ahora".
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 Hannah realmente fue afortunada, ya que de los 27 millones de donantes de médula del mundo, solamente 3 eran compatibles con ella, y pudo conseguir el trasplante de alguien anónimo. Es muy complicado poder encontrar un donante de médula compatible, y es por esa razón que también Stephen se vio emocionado por realizar estas fotos en Instagram: de esta forma puede dar a conocer la historia de su hija al mundo y concientizar a las personas de que se conviertan en donantes para poder salvar más vidas y que, al igual que con Hannah, puedan cambiar la vida de un paciente. 

Ahora, este dúo padre-hija solo tienen que preocuparse en cómo será su próxima foto de "alto riesgo".