Meghan Markle también tenía una fortuna antes de casarse con Harry: no sólo fue actriz

Meghan Markle y el príncipe Harry decidieron salir del círculo de la familia real para llevar una vida 'más normal'. Eso los llevó a asumir algunas consecuencias monetarias pues desde que se alejaron no reciben dinero por parte de la corona británica. Hasta ahora, parece que su situación financiera es mejor y parte de eso es gracias a la actriz americana.

En el momento que decidieron ir a Estados Unidos, Harry tuvo que usar la herencia de 13 millones de dólares que le había dejado la princesa Diana para comenzar su nueva vida, pues confesó que el príncipe Carlos no los ayudó económicamente como lo había prometido en marzo de 2020.

Esos milloncitos han sido de gran ayuda para ambos y por su parte, Meghan también ha puesto dinero en la mesa para sostener a su familia pues antes de llegar con la familia real, ella ya había acumulado 4 millones de dólares por su trabajo en la serie Suits y otros 80 mil dólares al año por su blog de estilo de vida llamado The Tig, cosa que les garantizó no quedarse en la calle.

Aunque era imposible que los duques de Sussex no tuvieran dinero, de acuerdo al periódico Evening Standard la pareja ahora acumula un valor combinado de 137 millones de dólares y Meghan por lo visto, tiene un valor por sí sola de 60 millones.

Los ex royals ya no se preocupan por el dinero pues Harry es el Director de Impacto en una empresa que ofrece servicios de coaching y salud mental y Meghan se ha encargado de hacer negocios con Spotify. Harán un podcast por el cual recibirán 18 millones de dólares y ya tienen en la cartera otros 100 millones por firmar con la empresa de streaming Netflix; al parecer dirán toda la verdad sobre su dura travesía en la familia británica.

El regreso de Meghan a la pantalla chica como actriz aún no es seguro y al parecer ahora se dedicará a cuidar al pequeño Archie y a su futuro bebé que ya está en camino, ambos gozarán de una vida tranquila por los negocios de su madre y el importante trabajo de su padre.

La jugosa herencia de Harry los ayudó para salir de aquella vida, pero Meghan también puso de su parte gracias al dinero que había ganado antes de ser la esposa de Harry y su habilidad para negociar ya les garantizó a ellos y a sus hijos que jamás les faltará nada.

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