¿Recuerdas lo hermoso que fue tener a tu bebé en brazos por primera vez? Seguro fue un hermoso, pero luego de la primer semana levantándote a las tres de la madrugada para darle de comer, comenzaste a añorar los grandiosos días de sueño ininterrumpido. Lo peor: tu pareja no entendía por qué siempre estabas cansada.
Esta mujer le explicó a su marido (con dibujitos) por qué siempre estaba cansada

Tal vez nunca supiste como explicarlo con bolitas y palitos, pero Mattea Goff lo logró de una manera épica y muy divertida. En su serie de Facebook Useless Nipples (pezones inútiles) explica de manera gráfica lo que es una noche habitual para una madre con un bebé recién nacido.
El título de los dibujos, Useless Nipples, se refiere a los pezones de los hombres, que no dan leche ni sirven para calmar a los bebés, lo que implica más trabajo para las mujeres en las noches.
La organización pediátrica Kids Health asegura que los recién nacidos piden de comer cada dos o tres horas.
Algunos pediatras recomiendan no ponerle guantes a tu bebé debido a la irritación que puede ocasionar en sus manitas, pero si no lo haces, te ocurrirá algo similar a lo que Goff describe en sus dibujos.
«-Debo cortarle las uñas. - Bueno, ahora debo limpiar esto».
Los expertos explican que los bebés sudan cuando toman leche materna debido a que el contacto físico con su mamá (o papá) eleva su temperatura, así que debe sudar para enfriar su cuerpo lo que algunas madres lactantes encuentran incómodo, sobre todo en días calurosos.
«¿Por qué suda? Yo me estoy congelando».
Tal vez ahora entiendas por qué como padre debes cumplir con tus obligaciones en las tareas domésticas y de cuidado, ellas también merecen descansar.
«-Buenos días cariño ¿No es fantástico el dormir? Vamos a acurrucarnos».
También se ha demostrado que el vínculo entre madres e hijos es más fuerte que con los padres, Mattea es prueba de ello.
«-Cuando papá va al baño: Veamos que hay hoy en Youtube -Cuando mamá va al baño: Es tan agradable tomar un minuto para... (suena la puerta)».
Mattea asegura que dibujó estos garabatos luego de que su esposo le preguntara por qué siempre despertaba cansada, esperando que le entendiera.
«-Tengo hambre. No encuentro mi corona ¿Puedo alimentar a los peces? -Sólo necesito un minuto ¿Puedes dármelo?».
Ella asegura que su esposo es un tipo fantástico, pero «a veces debes vivir las cosas para poder entenderlas».
«Creo que ya estuve demasiado tiempo en el baño. Creo que mi pie se durmió».
Mattea piensa que sus dibujos obtuvieron tanta atención porque la vida de madre es algo «difícil de explicar a quien no lo ha vivido, pero lo visual ayuda a compartir las ideas de manera más fácil si no sabes cómo expresarlo».
«-¡Mami, aún tengo hambre! ¡A los peces no les gustó su comida así que les di salchichas! ¿Me ayudarías a colorear? ¡Ahora! -Por el amor de Dios. ¡Toma, juega con este tampón!».
¿Qué te parecen sus ilustraciones? ¿Te identificaste con ellas?
Pst, pst, esto te encantará:









