Durante sus 99 años en este mundo, el príncipe Felipe tuvo un gran interés y pasión hacia los autos, en especial los Land Rover. Por esta razón, no es sorpresa que una de su últimas voluntades esté relacionada con un vehículo todoterreno 4x4 de esta prestigiosa automotriz inglesa.
El príncipe Felipe cumplió su último deseo después de la muerte: era lo único que le faltaba
Por:Raquel Ortiz
El último adiós del príncipe Felipe en un Land Rover
El 9 de abril de 2021, el mundo se conmocionó con la noticia del fallecimiento del príncipe Felipe. Con 99 años de edad, el duque de Edimburgo dio su último aliento y se despidió de este mundo.
Ser el consorte más longevo de la realeza británica –estaba a tan sólo dos meses de celebrar su cumpleaños número 100– podría suponer un funeral muy llamativo y en grande que conmemore su vida y su servicio de 69 años a la Corona. No obstante, su despedida real fue la más pequeña de la era moderna.
Las restricciones ocasionadas por el COVID-19 provocaron que sólo 30 personas pudieran despedirse del duque en el interior de la Capilla de St George el sábado 17 de abril: 29 familiares y su secretario personal, Archie Miller-Bakewell.
Su servicio fue bastante limitado y muy íntimo, pero cumplió con los gustos más personales del duque, quien realmente prefería un evento sin tanto escándalo. Además, una última voluntad del príncipe se hizo realidad: dejó a un lado la tradicional carroza fúnebre para ser llevado en un especial Land Rover que él ayudó a diseñar.
Land Rover ha tenido una relación estrecha con la realeza británica: desde hace años ha sido la automotriz predilecta de la Corona, los ha acompañado en giras, apariciones especiales y eventos emblemáticos.
Además, es una compañía con la que el príncipe Felipe colaboró y trabajo en conjunto en diferentes ocasiones. De hecho, fue de las primeras empresas en expresar su condolencias y en honorar la «contribución significativa a la fabricación, la ingeniería y el diseño británicos» que el duque de Edimburgo hizo durante su vida.
De acuerdo con The Daily Mail, hace algún tiempo, el príncipe Felipe trabajó con el Cuerpo de Ingenieros Eléctricos y Mecánicos Reales (REME, por sus siglas en inglés) y modificó dos Land Rover Defenders para que llevaran su ataúd de madera el día de su funeral y así se cumpliera uno de sus última voluntades que expresó a la reina:
quote: Sólo méteme en la parte trasera de un Land Rover y llévame a Windsor.
Según los reportes, el modelo del vehículo que transportó su cuerpo es una Land Rover Defender 130 Gun Bus, especialmente modificada por el príncipe.
En febrero, cuando el duque estuvo hospitalizado, los ingenieros y mecánicos reales llevaron a cabo acciones de mantenimiento y controles de seguridad de dos de estos emblemáticos todoterreno, uno negro y otro verde, para estar preparados para cualquier eventualidad.
Dos meses después, uno de estos modelos cumplió la última voluntad del duque mientras el mundo le da su último adiós.
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