El Internet es tan poderoso que incluso una persona normal puede convertirse en un fenómeno viral aclamado por la histeria colectiva en cuestión de segundos. Y nadie lo sabe mejor que Ryan McKenna, mejor conocido como " el niño selfie del Super Bowl". Bueno, tal vez también Edgar (el niño que se cayó del tronco), pero en fin.
El niño del Super Bowl y Justin Timberlake se reencontraron, y la sorpresa que le dio casi lo hizo llorar

El Super Bowl es uno de los eventos deportivos más vistos en el mundo, así que, si algo gracioso sucede en él, ten por seguro que TODOS lo recordarán por siempre. O hasta que salga otro meme dos semanas después. Esto fue lo que pasó cuando Ryan tuvo a su ídolo Justin Timberlake a su lado durante el medio tiempo y su celular decidió trabarse un poco en el peor de los momentos.
Lo bueno es que la vida es bella y la selfie sí pudo ser:
Lo mejor de todo es que el cantante no se conformó con que el niño de la selfie regresara a su casa sólo con una foto. La conductora Ellen DeGeneres tampoco quiso que hasta ahí llegara la historia, por lo que invitó a Ryan McKenna a su programa para que contara su inolvidable experiencia.
Lo que él no sabía es que la historia estaba a punto de volverse más emocionante. Durante la entrevista, Ellen le avisó que alguien quería hablar por teléfono con él. ¡Nada más y nada menos que Justin Timberlake! La expresión del niño cuando Justin dijo su nombre es incomparable. Estuvo al borde de las lágrimas por la emoción:
Además de al fin poder platicar con uno de sus artistas favorito, Ryan recibió dos enormes regalos para él y su familia. Justin le obsequió entradas para su concierto en Boston, porque quiere conocerlo con calmita y en persona. Y ahí no terminó la cosa, porque la misma NFL les regaló una experiencia VIP para un partido de los Patriotas en Nueva Inglaterra, así como cuatro boletos para ver a su equipo durante la pre y la temporada regular.
Justin Timberlake terminó la llamada diciéndole a Ryan que está ansioso por tomarse su segunda selfie con él. ¿Quién diría que una sola selfie podría desembocar en tanto? ¡Bien por Ryan!
Te recomendamos:









