En la era de la comunicación, ya pocos nos podemos resistir al innegable atractivo de las redes sociales. Cualquiera de nosotros tiene como mínimo un perfil en Facebook, y pasamos más de un rato diario mirando todas las curiosidades que nos ofrece sobre amigos y desconocidos.
6 síntomas de que estás enganchado a las redes sociales


Y es que, ciertamente, es una ventana al mundo tan a mano, que es difícil no sucumbir a su encanto y acabar sumido en las redes más de lo que debiéramos. Todo tiene una medida y es fácil cruzar la delgada línea que separa lo aconsejable de lo desmedido. ¿No sabes en qué punto estás? Pues te damos algunas claves para que identifiques si has cruzado el umbral y te has convertido en todo un fanático de las redes sociales. Sigue leyendo.
1. Hablas más por ellas que en persona

Este es un claro signo. Pasan las horas y te das cuenta de que no hablas en casa ni con familiares y amigos sino que te limitas a twittear, pulsar likes y subir selfies a instagram. Si pudieras contestarías por whatsapp a la persona que tienes al lado y todo para no dejar de mirar el móvil. ¿Y aún dudas si estás enganchado?
2. Necesitas contar en la red lo que haces a cada momento

Ya sea que estás esperando en la pescadería o en la boda de tu hermana, trabajando o de crucero, tú lo tienes que contar. Así que cualquier momento es bueno para subir un nuevo comentario y, si es acompañado con una foto, mejor aún. No existen los límites, todos tus contactos tienen que estar informados de lo que has estado haciendo desde el momento en que te levantaste y además tienes que documentarlo. ¿No te parece un claro signo?
3. El número de veces en que miras tus like

Bueno, muchos de nosotros hemos llegado a ese punto en que ya no podemos contar las veces que abrimos face para cosultar los like porque directamente nos quedamos mirando la página para ver cómo se van incrementando. Así que sí, estamos enganchados y además nos importa mucho la opinión de todo el mundo, ¿para qué negarlo?
4. ¿Tu peor pesadilla? 5% de batería
Tienes que salir a la calle y tardarás en volver y el móvil tiene un 5% de batería. Además vas a un fantástico concierto que esperas desde hace tiempo. Tienes dos opciones: llevarte el móvil que se apagará de un momento a otro o dejarlo en casa pero, en ambos casos, no podrás hacer fotos para subir a Instagram ni comentarios que poner ni mostrar a todos tus seguidores el concierto tan chulo al que has asistido y...entonces te despiertas.
¡Qué suerte! Solo fue una pesadilla y tu batería está completa pero no dudes que estás bien enganchado a las redes sociales.
5. Jamás te separas más de 50cm de tu móvil

Cuando la distancia más larga que hay entre tu móvil y tú es la largura del cable del cargador, mal asunto. Has llegado al momento en que no eres capaz de alejarte más de tu movil y, cuando carga y no puedes situarte más cerca o el cable no es tan largo como quisieras, es un auténtico fastidio. Ni que decir tiene que jamás te irías a la calle dejándolo cargar en casa y que de paso, puedes publicar un mensaje avisando de que vas a estar un rato sin poder publicar o mirar nada.
6. Ves el mundo desde la perspectiva de las redes

Llegados a este punto, ya no ves un bonito paisaje, sino una foto que tienes que compartir, no concibes una reunión sin los selfies y etiquetas correspondienes o visitar un lugar nuevo sin compartir la ubicación. Así que otro claro síntoma es que no te relajas y cada acción que haces a lo largo del día tiene para ti una asociación directa a las redes sociales.
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