No todas las obras de arte están en los museos. Algunas pertenecen a los coleccionistas, un hobby exclusivo de magnates que gastan millones de dólares en piezas reservadas para los ojos de unos pocos.
5 colecciones privadas de cuadros famosos realmente increíbles

Para mantenerlas, los millonarios también invierten una buena cantidad de dólares, así que, con suerte, alguno prestará uno de sus preciados cuadros a un museo, pero por tiempo limitado.
Adéntrate en la vida de los millonarios y descubre estas exclusivas colecciones de arte. ¡Que la envidia se haga presente!
Familia Wildenstein
Nathan Wildenstein, el abuelo de la adinerada familia, fue quien empezó con el hobby, estableciéndose como vendedor de arte. Pronto, las obras empezaron a quedarse en casa. La colección es un verdadero misterio. Se dice que contiene numerosas obras que datan del siglo XIV al XX e incluye artistas de la talla de Van Gogh, Renoir, Courbet, Cezanne, Monet, Rembrandt, Caravaggio, Boticelli y el Greco, y está valorada en diez mil millones de dólares.

Steve Cohen
Una colección relativamente nueva. Cohen empezó su hobby de arte en el año 2000, y para 2002 ya estaba en la lista de Forbes dedicada a los multimillonarios que coleccionan arte. Para 2015, el valor estimado de la colección era de mil millones de dólares. Ese mismo año compró El hombre que señala de Alberto Giacometti en 104,3 millones de dólares. Lucio Fontana, Jackson Pollock, Willem de Kooning, Jeff Koons, Edvard Munch, Pablo Picasso y Andy Warhol son algunos de los creadores de las obras que adornan su museo privado.
Familia Niarchos
Stavros Niarchos fue quien inició esta fina e importante colección de arte en 1949. A su muerte, Philip, su hijo, heredó las obras y añadió algunas más. Mientras su padre tenía un gusto más impresionista, Phillip se ha decantado por el arte moderno y adquirió Marilyn en rojo de Andy Warhol para dar su propio toque y acompañar sus cuadros de Van Gogh, Gauguin y el Greco.

Duque de Sutherland
En Escocia permanece una de las colecciones de arte más magistrales de todos los tiempos. El duque de Sutherland es el propietario de una compilación en la que puede apreciarse un autorretrato de Rembrandt de 1657 y Los sacramentos de Nicolas Poussin.
Casa de Alba
Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel fue quien inició la colección con obras de Domenichino, Ribera, Velásquez, Picasso y Correggio. El resto de su familia ha añadido obras postradas en el Palacio de Lira en Madrid, España. Goya también dejó su marca, no solo con sus obras «comunes», sino que también se encargó de pintar a la duquesa de Alba en 1795.
¿Cuál de estas colecciones privadas te gustaría apreciar?
- Una maravilla para los ojos: «7 maravillosos edificios famosos que son verdaderas obras de arte arquitectónico»









