La temporada 6 de Game of Thrones finalmente vuelve con su tercer episodio a un terreno más acostumbrado y lógico para un comienzo de temporada, en el que se impone la necesidad de un ritmo más lento y de exposición, para aportar nueva información y contexto a las historias que se desarrollarán en los próximos capítulos.
Game of Thrones: 7 momentos destacados que nos dejó el episodio "Oathbreaker" [6x03]

Es uno de esos episodios en que casi “no pasa nada”, aunque esta es una afirmación engañosa si hablamos de Game of Thrones.
Teniendo esto en cuenta, vayamos por parte para analizar algunos de los momentos más destacados de “ Oathbreaker”, episodio en cuyo título ya incluye el spoiler de uno de los hechos más relevantes.
#7 ¿Un nuevo Jon Snow?

El episodio empieza inmediatamente después del final de la semana pasada, para mostrarnos las circunstancias de la milagrosa resurrección de Jon Snow.
Como es sabido, lo más relevante nunca es el hecho en sí, sino sus consecuencias, así que algunas de las partes más interesantes de este episodio son las que tienen que ver con la vuelta a la vida del Lord Comandante de la Guardia de la Noche y cómo esto impactó a todos, incluyendo al mismísimo resurrecto.
Ahora los Salvajes ven a Jon como si fuera un Dios, aunque Tormund sabe que no es así por una simple razón: ningún Dios puede tener un miembro así de pequeño (ah, chistes de penes, los preferidos de Game of Thrones).
Melisandre también cree ahora que el príncipe del que hablaban las profecías es Jon Snow, y no Stannis como había creído antes, ya que éste último no tomó la precaución de resucitar. Davos, por su parte, recomienda a Jon seguir luchando, ya que tan bien le fue hasta ahora.
Por lo demás, el Jon Snow revivido parece ser el mismo Jon de siempre, y la muerte —la nada misma, según él— no parece haber obrado en él ningún cambio significativo.
#6 Hola Sam

La siguiente escena funciona simplemente para traer de regreso a Sam y Gilly, quienes no habían aparecido desde el final de temporada anterior.
También para recordarnos, por si lo habíamos olvidado, que Sam es un debilucho, lo que no hace más que subrayar el hecho de que será un gran maester.
Sam le dice a Gilly que ella y el pequeño Sam es todo lo que le importa, olvidando en ese momento, probablemente a causa de las náuseas, a su gran amigo Jon Snow. Afortunadamente no se enteró de todo el drama de la muerte y resurrección de Jon, lo que hubiera sido devastador para él.
#5 La torre de la decepción

Bran Stark sigue recorriendo el pasado de la mano del Cuervo de tres ojos, que insiste con arrastrarlo fuera de sus visiones cuando todo va poniéndose interesante, como si le desenchufara la consola de videojuegos cuando está jugando al FIFA y está por salir campeón.
Ahora su visión nos lleva a uno de los momentos más emblemáticos de la saga Canción de hielo y fuego y en particular uno que es crítico para toda la historia; la batalla en la Torre de la alegría.
En un movimiento un poco engañoso por parte de la serie, que había adelantado la escena en la Torre de la Alegría, la gran revelación que probaría la célebre teoría R+L= J fue dejada en suspenso.
El flashback tiene un par de momentos interesantes de todas maneras. El joven Ned Stark se pregunta por qué los tres miembros de la Guardia del Rey no estaban protegiendo al Rey o al príncipe durante la batalla del Tridente, y Ser Arthur Dayne responde que tienen órdenes de permanecer en la torre. Esto es una confirmación de que uno de los argumentos sostenidos por la teoría R+L= J está bien encaminado: lo que hay en la Torre es lo suficientemente importante para los Targaryen como para disponer a tres guardias para protegerlo (es decir, la descendencia de Rhaegar).
Por otra parte, fiel a la filosofía de Game of Thrones, se nos revela cómo hizo Ned Stark para vencer al gran luchador Arthur Dayne, notoriamente mejor que él: Howland Reed lo mató por la espalda cuando estaba a punto de vencerlo. Así, un momento que había quedado en la historia como mítico y heroico se convierte en la realidad en algo mucho más sucio y mundano.
Por último, un detalle: Bran interfiere en la escena llamando a su padre, y éste parece dudar un momento, como si lo hubiera escuchado. ¿Esto quiere decir que Bran puede modificar el pasado? Back to the Future meets Game of Thrones.
#4 Los entramados políticos

Lord Varys demuestra por qué un eunuco sin ninguna habilidad para el combate, sin apellido poderoso y que trabaja de manera independiente se las ha arreglado para sobrevivir en Westeros tanto tiempo.
Varys es astuto. Un gran negociador cuyo capital es la información, la que obtiene de las maneras más variadas y creativas, como utilizar a niños huérfanos de los que nadie sospecharía como espías. Ahora desempeña un papel fundamental en Meereen, ante un gobierno que ha quedado sin líder y sin apoyo.
La estrategia de Varys es tan eficaz que ahora ha sido imitada por Qyburn al servicio de Cersei. Lentamente Cersei comienza a ganar terreno en Desembarco del Rey, lo que es extrañamente reconfortante. Pero más vale malo conocido que malo con aires de santurrón y con nombre de pájaro.
El pobre Tommen no sólo está atrapado en medio de estos pesos pesados de la manipulación y el ansia de poder, sino que todas las predicciones están en su contra y nadie jugaría demasiadas fichas a que termine vivo esta temporada (hay que recordar aquella profecía sobre hijos muertos que una bruja lanzó a una joven Cersei, que viene cumpliéndose al pie de la letra).
#3 El adiós a Arya Stark

Después de su arduo entrenamiento, que nada tuvo que envidiarle al de Daniel San en Karate Kid y al de Matt Murdock en Daredevil, con toda la tortura física y psicológica, parece que finalmente la jovencita que solía llevar el nombre de Arya Stark se ha convertido en Nadie, cumpliendo con las exigencias del Dios de Muchos Rostros, que tal como se exige para cualquier dios que se precie de tal, es verdaderamente sádico y perverso.
Las posibilidades que se abren ahora para “la niña sin nombre” son muchas y resultan muy interesantes, sobre todo si va a intentar cumplir con su célebre lista que todavía incluye nombres como Cersei Lannister, Gregor Clegane (suerte con eso) y Walder Frey.
#2 Para volver así era mejor no volver

Rickon Stark, el más pequeño de la desafortunada familia, no aparecía en la serie desde la temporada 3, cuando se separó de Bran para quedarse de este lado del Muro junto a Osha y su lobo huargo.
Indefensos en el Norte, o en todo caso contando como única defensa un lobo huargo que no tuvo la mejor de las suertes, era cuestión de tiempo hasta que cayeran en manos del sádico Ramsay Bolton, ahora autoproclamado Guardián del Norte.
Esta aparición sirve para consolidar un enfrentamiento que puede vislumbrarse en el horizonte, y que nos lleva al siguiente punto.
#1 Romper el juramento

Si la muerte y la posterior resurrección de Jon Snow no lo modificó en cuanto a su naturaleza, ni volvió convertido en caminante, warg, zombie o lo que sea, sí parece haber cambiado su visión sobre lo que debe hacer o cómo debe hacerlo.
De este modo, después de cumplir con el castigo a sus traidores, incluyendo a su querido Olly, decide abandonar la Guardia de la noche, rompiendo con su juramento (¿O no? Técnicamente su obligación es hasta la muerte. Pero el episodio se titula “ Oathbreaker”, “el que rompe el juramento”).
La aparición de Rickon, el último heredero de los Stark, apunta al camino que probablemente seguirá Jon Snow tras su partida de Castillo Negro. Pero Bran está a punto de conocer otros detalles sobre su pasado que tal vez Jon quiera saber.
Poco a poco, los Stark comienzan a retomar el protagonismo que las tragedias, la muerte, el exilio y las traiciones le habían quitado en la serie.







