5 cosas para aplaudir en Ant-Man

A partir de estos días se encuentra en cines de todo el mundo Ant-Man, la última película del Universo cinematográfico de Marvel, que introduce un nuevo y simpático superhéroe al mundo de los Iron Man, Capitán América, Thor y demás.

Con Paul Rudd en el papel de Scott Lang/ Ant-Man, y Michael Douglas como Hank Pym (el Ant-Man original), la película adapta un cómic y unos personajes no tan conocidos de Marvel, en un intento por llevar la popular franquicia de superhéroes a un terreno algo diferente.

Y en gran parte, lo logra, por ese motivo, aquí te dejamos 5 cosas para aplaudir de Ant-Man:

(Hay spoilers)

#5 El humor

De qué otra manera se va a abordar una película sobre un superhéroe llamado “el hombre hormiga”, cuyo superpoder consiste en hacerse pequeño y ganar fuerza, si no es con un tono de comedia.

El humor está presente en toda la película. Casi en cada una de las escenas hay un gag, un chiste o una situación humorística, pero el director Peyton Reed —que antes sólo había dirigido comedias— tiene sin dudas la habilidad para hacer que esto no resulte agobiante o poco pertinente, sino simplemente como un detalle adicional y divertido al desarrollo de la trama. 

Hay espacio también para momentos de tensión, de suspenso, de peligro, de puro drama o simplemente emotivos, pero casi todos ellos están coronados por un chiste que nos recuerda que Ant-Man es sobre un ex ladrón que se pone un traje para hacerse pequeño y evitar el mal uso de esta misma tecnología, y no son los Avengers, los superhéroes más poderosos del planeta, evitando la destrucción de la Tierra por parte de malvados y temibles alienígenas.

#4 El drama

Muchos aspectos de la historia tienen, evidentemente, un trasfondo dramático, que es el que nos permite involucrarnos y preocuparnos por los personajes, identificarnos con ellos. 

Scott Lang acaba de salir de la cárcel y quiere mantener una vida honesta, dejar atrás sus días de ladrón, para poder ver crecer a su hija. Pero nadie le da trabajo por ser un exconvicto y se ve arrastrado nuevamente al crimen. Su exesposa no lo dejará ver a su hija hasta que no reforme su vida, pero no tiene demasiadas opciones para hacerlo. Hank Pym será su salvador.

Y la historia de Hank Pym es igual de trágica e igual de importante (y está arraigada al Universo Marvel), no sólo por haber sido excluido de su propia compañía, sino por su pasado como superhéroe y cómo esto afectó a su familia, especialmente la relación con su hija, Hope.

El acierto de Ant-Man es precisamente establecer estas historias personales, que echan luz sobre las motivaciones y los sentimientos de los personajes, y no ser simplemente algo con la premisa de “son héroes porque ese es su deber”.

#3 Darren Cross

El villano de Ant-Man es uno que encaja con el resto de la película por sus motivaciones y ambiciones.

Su historia es casi un cliché narrativo —el discípulo que se obsesiona con el mentor y se rebela contra él— pero en la película funciona y Corey Stoll hace un gran trabajo.

Lo mejor es que Darren Cross no ha logrado aún dominar la tecnología Pym, lo que nos lleva a algunos de sus mejores (y más crueles) momentos, como sus pruebas con corderos, mientras que la inminencia de que lo logre se cierne como amenaza sobre los primeros dos tercios de la película. En esta parte, Darren Cross es un hombre ambicioso, decidido y convincente.

Tal vez sobre el final, cuando su naturaleza de villano, su forma de actuar y de hablar, va a terrenos más obvios que lo asemejan a cualquier otro villano genérico, no resulta tan interesante, pero eso lo salva el excelente final de la película, lo que nos lleva al siguiente punto.

#2 El final

Los finales de las películas de Marvel son los que más atados quedan al género de superhéroes, e inevitablemente todos ellos conducen a lo mismo: una épica batalla final a gran escala, con una gran destrucción y con la amenaza del villano a punto de concretarse, sólo para ser evitada a último momento por el héroe.

El final de Ant-Man sigue esta estructura, pero gracias a la naturaleza del superhéroe, su superpoder y el villano, logra hacer un final esencialmente diferente y novedoso, y bastante genial.

Desde la irrupción de Scott Lang, ahora en pleno control de sus poderes y sus hormigas, al edificio Pym Technologies, pasando por la secuencia en el helicóptero y luego dentro del maletín (con uno de los mejores chistes de la película: el de “te voy a desintegrar”, mientras en el teléfono móvil comienza a sonar “Disintegration” de The Cure), hasta llegar al gran enfrentamiento final... en la habitación de una niña.

Esto incluye excelentes gags humorísticos y visuales, como el tren de juguete y una hormiga accidentalmente agrandados.

La pelea entre los dos es brillante, porque el encanto no es la espectacularidad explosiva sino todo lo contrario. Es la antítesis de las peleas del estilo Hulk vs Hulkbuster.

#1 La relación con el resto del MCU

Ah, el gran problema de la películas de Marvel, que deben encontrar el equilibrio justo como para sostenerse por sí mismas con una historia propia y autosuficiente pero también encajar como un capítulo más dentro de la saga global del MCU. 

Ant-Man encontró la solución perfecta (algo que Avengers: Age of Ultron no hizo), al centrar la historia en Scott Lang, un recién llegado al mundo de los Avengers y, hasta el momento, completamente ajeno a él (al punto de sugerir llamarlos para lidiar con Darren Cross). 

El momento tal vez más satisfactorio para los que buscan conexiones con el resto del MCU y con los Avengers en particular, llega de forma sorpresiva, cuando Pym le da instrucciones a Lang de infiltrarse en un depósito propiedad de Howard Stark para tomar un dispositivo necesario para impedir los planes de Cross.

De repente, se revela que el establecimiento es la nueva base de los Avengers, tal como vimos en Age of Ultron, situando la trama después de los acontecimientos de ésta. Para fortuna de Lang, el único vengador presente en el lugar es Falcon, lo que nos da otro de los grandes momentos de la película. Ant-Man y Falcon se enfrentan y Ant-Man logra salirse con la suya, demostrando por primera vez las verdaderas virtudes de Lang (¡es capaz de vencer a un vengador!), pero también ubicándose a sí mismo en el radar de los Avengers. 

Falcon será entonces, como se revela en la escena post-créditos, el elemento que conecte a Ant-Man con los Vengadores.

¿Qué otra cosa crees que son dignas de aplauso en Ant-Man?

Ver también: Ant-Man, el nuevo superhéroe de Marvel que no necesita llamar a los Avengers [reseña]