Muy pocos tienen talento para la sátira, y menos aun para parodiar películas de éxito dentro de otras películas, sobre todo en estos tiempos donde abundan secuelas con muy poco tino y demasiada vulgaridad. Dentro de esta selección hay algunas verdaderas perlas hechas con mucho mimo por sus equipos de producción, y a veces superando los originales con un sentido del humor realmente brillante y hasta exquisito.
10 divertidas películas en las que el cine se ríe de sí mismo

De todo un poco entre diez títulos que van del terror al western pasando por el cine histórico y el romántico, el thriller, el cine de catástrofes y el de espionaje, todo pasado por la batidora de la risa: veamos 10 parodias que se ríen del cine.
1. Dance of the Vampires (1967), Roman Polanski
El veterano Abronsius y su joven ayudante Alfred, viajan por Transilvania para confirmar la existencia de los vampiros. No más empezar se detienen en una posada cuyas paredes y ventanas están cubiertas de ristras de ajos… Una película de vampiros a la vieja usanza, con las tradiciones del tema atravesadas por el humor negro singular de Roman Polanski. Esta vez actúa él mismo y su esposa Sharon Tate, quien moriría asesinada un año después.
Nunca más el director volvió a trabajar con el humor como protagonista, excepto un fallido homenaje al género de aventuras que sólo por momentos resultó acertado ( Pirates, 1986).
2. Blazing Saddles (1974), Mel Brooks
El western boca abajo y saturado de cosquillas, dirigida y protagonizada por Mel Brooks, un especialista en parodias de todo tipo, aquí interpretando a un avaricioso gobernador que hace todo lo posible que la gente abandone la ciudad y así vender los terrenos a una compañía de ferrocarril. Para facilitar su plan nombra sheriff a un hombre de raza negra condenado a la horca con el fin de que anime revueltas y anarquía que justifiquen la represión… Un plan que no le saldrá precisamente bien, pero que está muy bien servido de gags sobre las legendarias producciones de «tiros a caballo», con un final sorprendente de cine dentro del cine.
3. Monty Python and the Holy Grail (1975), Terry Jones y Terry Gillian
La célebre compañía de actores cómicos ingleses Monty Python logró una de sus obras más redondas al mofarse de un tema adorado por millones de personas a través de la literatura y no pocas películas: las aventuras del Rey Arturo y sus caballeros en busca del Santo Grial.
Es una estupenda revisión irreverente sobre las películas de los 50 y 60 donde se enaltecían a todos estos personajes, ahora desmitificados de principio a fin. Hoy puede resultar desigual, pero aun así tiene sketchs nunca superados, como el del caballero negro, el del padre explicándole al hijo cómo construyeron el castillo, los caballeros que dicen NI, las preguntas del guardián del puente, el conejo asesino… Siempre aprovechando las situaciones para meterse con los tiempos modernos.
4. High Anxiety (1977), Mel Brooks
Excelente parodia del cine de Hitchcock, un logro sin altibajos. Mel Brooks, como tantas otras veces, escribe, produce, dirige e interpreta, pero esta vez con un profundo conocimiento de la filmografía del genial director británico, atreviéndose a reírse con extraordinaria habilidad de las persecuciones, los crímenes, los perfiles psicológicos y toda clase de escenas muy reconocibles no más empezar la película. Llena de hallazgos, especial interés tiene la secuencia de la ducha de Psicosis, donde remeda aquel montaje con gran precisión, y una broma final fuera de serie.
- No te lo pierdas: «Psycho: Todo lo que siempre quisiste saber sobre la escena de la ducha»
5. Airplane! (1980), Jim Abrahams
El cine de catástrofes aéreas ocupa las principales situaciones, pero un equipo brillantísimo se las ingenia para parodiar mucho más como el cine policiaco, el romántico, el de aventuras, el de melodramas familiares… No deja títeres con cabeza, y lo que queda es tan desternillante que dio cabida a una segunda parte apenas dos años después ( Airplane! 2).
Parte del equipo se dedicó de lleno a este tipo de películas, produciendo una cantidad muy grande, la mayoría de inferior calidad, pero todas con sus momentazos de gloria. Estas son las que resultan impecables, con una capacidad de burla muy comunicativa que no envejece con el paso del tiempo: como los clásicos.
6. Fatal Instinct (1993), Carl Reiner
Ingeniosa sucesión de situaciones absurdas, pero en muchos casos no mucho más disparatadas que películas como Basic Instict o Sleeping with the Enemy: sexo, violencia, intriga con un policía que llega a meterse en un parque de atracciones para hacer una persecución montado en uno de los autos chocadores…
Armand Assante nunca había participado en una comedia tan loca y lo hace de maravilla acompañado de actrices como Sean Young, Kate Nelligan, Sherilyn Finn.
7. Stiff Upper Lips (1997), Gary Sinyor
El irónico humor británico en su máxima expresión, pues ridiculiza a sus propios clásicos con el engolamiento y la rancia estirpe clasista por bandera, permitiéndose superar sus límites habituales y avanzar en un tono más bien sarcástico, con toques de burlas eróticas muy logradas. Van detrás de sus títulos de mayor prestigio y lo mejor de la parodia es que sus intérpretes no son bufones habituales, sino exquisitos actores aplaudidos en lo mejor del teatro, el cine y la televisión.
8. Scary Movie (2000), Keenen Ivory Wayans
Esta fue la primera de una larga serie de parodias del cine de terror y de ciencia-ficción, que arranca en el 2000 y sigue hasta el 2013. Parece que en la primera entrega se dejaron las más potentes ideas del humor satírico, en un encadenado de situaciones divertidas, por momentos espectaculares, con un gran acierto que consiste en parodiar películas bastante recientes al año de producción, tales como I Know What You Did Last Summer, The Blair Witch Project, Matrix y Sexto sentido.
9. Johnny English (2003), Peter Howitt
La maestría del actor inglés Rowan Atkinson desplegó sus mayores talentos en una serie de gran popularidad en el mundo entero: Mr Bean. Pero es un tipo de talento en todos los géneros (también en el teatro musical), y se tomó su tiempo para realizar esta formidable parodia de James Bond, el héroe inglés por excelencia. En su segunda parte ( Johnny English: Returns, 2011) va más allá. Son películas que carecen del ritmo enloquecido de las parodias norteamericanas, pero algunos de sus sketchs resultan fenomenales.
10. Hot Fuzz (2007), Edgar Wright
Un prodigio del humor inglés en una producción que se mete sin piedad con el espionaje y la policía británicos, pero parodiando el trhiller con arrolladora acción de tal manera que las risas y sonrisas que genera van unidas a la capacidad de sorpresa por las muchas similitudes visuales con las películas «de verdad». En el excelente reparto intérpretes con magistral vena cómica, pero también con muchos grandes del cine de Reino Unido que se atreven con la comedia por primera vez, como por ejemplo Timothy Dalton, ex James Bond en dos ocasiones ( The Living Daylights, 1987, y Licence to Kill, 1989).
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